CASA SCHEU
POR: FABIAN CAMILO GARZON MORENO
Del Traje Ingles a la Casa Loosiana
A Adolf Loos lo marcó de una manera crucial su estadía de tres años en los Estados Unidos, desde 1893 a 1896. Y posteriormente su visita a Londres y París también fueron de gran influencia para desarrollar su visión hacia la arquitectura y hacia la sociedad austriaca y vienesa. Adolf Loos nace el 10 de diciembre de 1870 en la ciudad de Brunn, antigua capital de la Moravia meridional, en la actualidad Brno, Republica Checa. Su padre un cantero de quien desde pequeño y gracias a tener en casa un taller, aprendió sobre el trabajo y el valor de los materiales.
Tras haber estudiado en la escuela de artes y oficios en Reichenberg, Bohemia en 1888 y en la escuela politécnica de Dresde en 1893 donde no culmino sus estudios, se embarca hacia el nuevo mundo. Allí visita la exposición universal de Chicago, y posteriormente en su estadio también conoce San Luis, Filadelfia y Nueva York. En su permanencia en América trabaja en múltiples empleos no solamente como arquitecto, pasando desde lavaplatos hasta periodista. En su regreso a Viena viaja a Londres y París, dos destinos los cuales seguiría frecuentando junto a ciudades tan importantes como Berlín, Hamburgo, Venecia, Milán, Praga y Budapest. Aunque seria Londres junto con América los lugares que con su sociedad moderna servirían a Loos para desarrollar su crítica cultural.
Le impactó y fascinó la vida cotidiana de esas dos sociedades las cuales tenía como el centro de la cultura occidental y las cuales deberían para él ser el modelo de cualquier ciudad que quisiera ser moderna. Por ello fue un crítico constante hacia la sociedad vienesa y austriaca la cual según las teorías sociales evolucionistas de Herbert Spencer, a quien se dice fue una influencia para loos, ´´entre la sociedad feudal y la moderna se encontraban las sociedades en estado de transición como Austria´´1. Siendo una doble monarquía la austro-húngara en donde aun se mantenía la admiración por la vida opulenta por un lado y a la vez la vida rural, pero ambas siendo puntos críticos para Loos ya que era de allí de donde se desprendían conflictos y temas como el ornamento y la imitación, que derivarían en la honestidad constructiva.
A pesar de su constante admiración hacia la vida moderna, analizaba como esa misma rapidez, donde lo que interesaba ahora era el tiempo de trabajo, la cantidad y el dinero más no la calidad, era lo que hacía que se llegara a la imitación de mejores materiales y acabados, ya que se pretendía aparentar una elegancia. Estos problemas los veía desde los procesos de manufactura en pequeños utensilios de cocina, pasando por la ropa y el mobiliario hasta la arquitectura.
Por esta y más razones como su manera de vestir, se le consideraba como parte de la quintaesencia dandi siendo sus antecesores personajes como Thomas Jefferson, Baudelaire y el principal Beau Brummel, quien decía que: “la mayor humillación en que puede caer un hombre es en llamar la atención en la calle a causa de su aspecto externo”2.
Por esta y más razones como su manera de vestir, se le consideraba como parte de la quintaesencia dandi siendo sus antecesores personajes como Thomas Jefferson, Baudelaire y el principal Beau Brummel, quien decía que: “la mayor humillación en que puede caer un hombre es en llamar la atención en la calle a causa de su aspecto externo”2.
Como se observa en la foto, Loos vestía de igual manera en que proyectaba sus edificios y casas, como lo es la casa Scheu, libre de cosas innecesarias. Como escribe Jules Lubbock: ´´lejos de ser un producto de la vanidad el dandi era un medio para combatirla; el dandi obedecía las reglas pero para vengarse de ellas y triunfar; el dandi era un habitante de la ciudad moderna que se mezcla anónimamente entre la multitud pero que se aleja para observarla´´3.
Como observó en Inglaterra la higiene y el buen vestir no era algo exclusivo de los reyes, quien quisiera tenía el derecho de ir bien vestido. Loos decía: ´´Ir bien vestido: ¿Qué significa eso? Significa ir correctamente vestido´´, a lo que agregaba: ´´ Una pieza de vestir es moderna si con ella se llama el minino de atención, en el centro de la cultura, en una determinada ocasión, entre la mejor sociedad´´4.
Como observó en Inglaterra la higiene y el buen vestir no era algo exclusivo de los reyes, quien quisiera tenía el derecho de ir bien vestido. Loos decía: ´´Ir bien vestido: ¿Qué significa eso? Significa ir correctamente vestido´´, a lo que agregaba: ´´ Una pieza de vestir es moderna si con ella se llama el minino de atención, en el centro de la cultura, en una determinada ocasión, entre la mejor sociedad´´4.
Tanto en la casa Scheu como en las más representativas de Loos y del Raumplan como, la casa Muller y Moller se observan todos estos principios que regían la misma vida de Adolf Loos. Sobriedad en el exterior y calidez en el interior. Y el Raumplan era más que solo estética y diseño, era un resultado de la misma cultura, como nos lo plantea Lubbock: ´´ lo que determina el diseño era la cultura, no el trabajo del arquitecto, y el arquitecto no pierde el tiempo diseñando fuentes y decorativas estructuras, sino se ocupa de desagües, tuberías y baños´´5. El Raumplan es a la vez una manera de ahorrar dinero y espacio.
A pesar de sus constantes críticas por parte de toda una sociedad, Loos mantenía un pequeño grupo de amigos, de quienes se apoyó para fundamentar y desarrollar su obra. Entre ellos estaban los literatos Karl Kraus y Peter Altenberg, el músico Arnold Schonbeg y el pintor Oscar Kokoschka. Estuvo casado tres veces, con Lina Obertimpfler, Elsie Altmann y Claire Beck. Hacia 1930 su sordera era casi completa y muere el 23 de agosto de 1933 en el sanatorio del Dr. Schwarzmann en Karlsbug, cerca de Viena, a causa de una enfermedad venérea.
Lubbock. Jules. ´´Adolf Loos y El Dandi Ingles´´. En: Anderson. S. Adolf Loos / S. Anderson. ... [et al.] ; selección e introducción Antonio Pizza. Editorial Stylos. Barcelona. 1989. Pg. 174
Adolf Loos hacia 1903; famoso por su uso de los trajes ingleses y por su deseo de impresionar.
5. Lubbock. Jules, op. cit. supra ,nota 1, pg. 179.
LA CASA SCHEU
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Linea de tiempo vida y obra Adolf Loos
LA CASA SCHEU
La Casa Scheu y Adolf loss en la Arquitectura Moderna
Adolf Loos ha significado una gran influencia para los arquitectos que lo precedieron y para todas las generaciones siguientes que continuaron desarrollando sus ideas, cada vez hacia sociedades más libres a partir de la eliminación del ornamento. Es por esta y muchas otras razones que autores tan importantes como Aldo Rossi, Leonardo Benévolo y más actualmente Jules Lubbock, han dedicado su tiempo al estudio de la obra de Loos. Son estos tres autores a los cuales nos vamos a referir en este caso, para llegar a entender de una manera crítica y cada vez mejor la gran obra del arquitecto vienes.
Es bien sabido, la gran influencia que significó para Loos el trabajo artesanal, el valor que le daba a cada material y el valor del trabajo humano. Para Loos cada material tiene su propia forma de expresión y cada forma se ha hecho a través de la utilidad y de la fabricación de cada material. En este punto tanto Aldo Rossi como Leonardo Benévolo coinciden en que es la intuición una herramienta fundamental en la manera de proyectar de Loos. ´´Loos está acostumbrado a considerar las formas arquitectónicas como realidades intuibles, independientemente de la mediación del dibujo´´1. En palabras de Richard Neutra quien fue su alumno "desencadenó una rebelión contra la costumbre de indicar las dimensiones en números o dibujos medidos. Opinaba, como me dijo, que tal procedimiento deshumanizaba los proyectos"2.
También estaba en constante desacuerdo en el uso excesivo e inoficioso del detalle en el dibujo arquitectónico, por la misma razón que el mismo plantea: "Si quiero que un revestimiento de madera tenga una determinada altura, me voy a la obra, pongo la mano a una cierta altura y el carpintero pone una marca con el lapicero. Después me alejo y lo miro desde un punto y desde el otro, imaginando con todas mis fuerzas el resultado concluido. Este es el único modo humano de decidir la altura de un revestimiento de madera o el ancho de una ventana"3. Por esta manera de concebir el dibujo arquitectónico y por fundamentar su obra en la intuición fue criticado en gran medida por el sector académico y más aun por el hecho que no poseía titulo, ni cartones pero poseía la mayor influencia entre muchos. En cambio el dibujo para él debía funcionar como mediación para unir los diferentes espacios (cada uno debía tener la altura más oportuna dependiendo como estaba pensado), y para encajar los desniveles en el volumen del edificio, que en ultimas era el desarrollo de su Raumplan.
Esto se puede observar claramente en el corte arquitectónico de la casa Scheu, donde cada planta de las cuatro generales que se observan, tiene una altura diferente e incluso en sitios especiales como el espacio de la chimenea (imagen1) existen variaciones de altura en una misma planta.
También cada espacio como el de la imagen 1, debía tener su carácter distintivo, marcado por el adecuado uso del material. En este espacio se observa el principio del revestimiento del que tanto habló Loos y que puso en práctica. La madera recubriendo las paredes, el ladrillo marcando el espacio de la chimenea y el piso cubierto por alfombras, así como se preguntaba: ´´ ¿El espacio cubierto por alfombras no es una imitación? No, está dejando claro su significación como revestimiento de la superficie. No se debe confundir el material revestido con el revestimiento´´4.
Su influencia Wagneriana se ve en este ejemplo y en especial en sus primeros trabajos como la Looshaus en Michaelerplatz, con el uso de grandes superficies como se observa en el alzado de la fachada de la casa Scheu, también en el uso de grandes ventanales y en una simetría parcial, que se observa más que todo en su primera obra: Villa Karma, pero que continua ejerciendo fuerza en sus siguientes trabajos.
Sin embargo ese distanciamiento de lo estilístico que se ve en esas fachadas lisas y austeras pintadas de blanco, y que también representa la influencia de Otto Wagner como lo plantea Benévolo: ´´ tiene que compensarse con la rigurosa conservación de otros, la planificación volumétrica´´5. En este punto podemos diferenciar en cierta medida las posturas de Benévolo y Aldo Rossi ya que el primero habla de ´´una simplificación del repertorio tradicional… y el abandono de ciertos valores estilísticos, como el color´´6, en la obra de Wagner, pero Rossi lo plantea desde ´´el fallido intento del neoclasicismo junto con Wagner para renovar la relación del presente con el pasado´´7, sin desmeritar su obra ya que él marco una pauta para la continuación en Loos.
En la casa Scheu como en la mayoría de sus obras, el interior de Loos es el que mantiene en mayor medida los valores estéticos del arte. Y aunque Loos jugaba con esa dualidad exterior- interior, y a pesar que planteaba que poco de la arquitectura pertenece al mundo del arte, ´´estaba completamente influenciado por su actualidad vienesa, la cual con el arte expresionista hacen que Loos permanezca atado a esa vida del hombre estático primigenio del que tanto quiere deprenderse´´8. Aquí Aldo Rossi es mucho mas critico y realista con respecto a que tanto se desprendió de su cultura que no sentía como suya.
Para llegar a una crítica más profunda de la obra de Loos vamos a recurrir al autor Jules Lubbock, quien ya es un personaje de nuestros tiempos, y claro, desde una perspectiva contemporánea Adolf Loos tiene muchos puntos discutibles, como es normal tenerlos.
Lubbock plantea a Cesare Lombroso como una gran influencia para Adolf Loos en su búsqueda de argumentar la separación del ornamento, ya que Lombroso siendo un criminólogo argumentaba que la criminalidad era un mal congénito y ´´fue en Lombroso donde encontró su justificación para argumentar que el primitivismo, la barbarie y el uso del ornamento iban de la mano del salvajismo y el exceso sexual´´9. También es bastante debatible el hecho que Loos fuera tan admirador de la aristocracia y del refinamiento que lo llevaba a usar traje ingles, ya que no van de la mano con sus ideas del igualitarismo, de la importancia a la clase obrera, ni como decía: ´´las revoluciones siempre vienen de abajo, y este abajo es la fabrica´´10.
Ya que a Loos le tocó vivir la ruptura de la monarquía austrohúngara, es comprensible su búsqueda hacia otros modelos y hacia otros estilos en la arquitectura y en la cultura. Sin embargo en esos periodos de transición como lo plantea Lubbock: ´´entre esas nuevas clases, el rechazo de un grupo a imitar el estilo y el comportamiento de los grupos socialmente superiores juega un papel más importante´´11. Pero probablemente no tenía en cuenta que esa sociedad que tanto admiraba, que era el nuevo mundo, la América de las oportunidades, estaba igualmente estática y tomaba como ejemplo el anhelo al viejo continente.
IMÁGENES Y PLANOS CASA SCHEU
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Imagen 1. La Biblioteca en el cuarto de estar y espacio de la chimenea. Foto de 1930.
En: Sarnitz. August.Adolf Loos 1870-1933 Arquitecto, critico cultural, dandi. Editorial Taschen. Alemania. 2003. pp 52 |
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| PLANTA PRIMERA 1912 |
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| PLANTA SEGUNDA |
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| PLANTA TERCERA |
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| CORTE LONGITUDINAL |
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| FACHADA ACCESO |
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| CORTE FACHADA |
ANÁLISIS DE LA IMAGEN
Tradición y Vanguardia: Relación Íntima
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La casa Scheu fue diseñada por el arquitecto austrohúngaro Adolf Loos en el año 1912.
La foto de la casa es tomada desde un ángulo que permite una doble fachada, es decir que produce una imagen con dos puntos de fuga. Esto nos permite ver la fachada que da a la calle y la fachada este desde donde se accede a la casa. Desde el acceso se observa ya unas intenciones modernas pero a la vez retomando elementos clásicos, lo cual es característico de la arquitectura loosiana, y como escribe Kenneth Frampton, es una: ‘Articulación de polaridades. La neutralidad del exterior frente al intimismo del interior, la oposición en términos simbológicos del dentro y del fuera, entre la masculina severidad del contenedor y el femenino contenido, lo clásico reflejado en el exterior contrapuesto con lo popular del interior.’ 1.
La foto de la casa es tomada desde un ángulo que permite una doble fachada, es decir que produce una imagen con dos puntos de fuga. Esto nos permite ver la fachada que da a la calle y la fachada este desde donde se accede a la casa. Desde el acceso se observa ya unas intenciones modernas pero a la vez retomando elementos clásicos, lo cual es característico de la arquitectura loosiana, y como escribe Kenneth Frampton, es una: ‘Articulación de polaridades. La neutralidad del exterior frente al intimismo del interior, la oposición en términos simbológicos del dentro y del fuera, entre la masculina severidad del contenedor y el femenino contenido, lo clásico reflejado en el exterior contrapuesto con lo popular del interior.’ 1.
Retomando el elemento del acceso, podemos decir que es moderno en cuanto no se sitúa en la fachada frontal, y la puerta que existe en la fachada principal, en principio se asimila como el acceso a la casa pero no lo es. Y retoma aspectos clásicos ya que el acceso se hace por medio de escaleras que se pegan al costado este de la casa, la cual en una primera impresión no tiene nada de extraordinario, sin embargo su pendiente es bastante pronunciada. Subiendo por la escalera, al costado derecho se incrusta en la fachada de una manera muy simple, incluso improvisada una baranda metálica. Improvisada ya que se observa cómo le toca salirse un poco para evadir la cornisa. En oposición al lado izquierdo construye unos muros bastante imponentes que encierran la escalera y le dan una mayor jerarquía a la misma. De nuevo vemos la oposición entre lo moderno, que sería la baranda metálica y su solución constructiva muy simple y el muro macizo con su remate superior en un material pétreo al parecer mármol.
Las fachadas son completamente lisas, lo único que rompe con esa característica es la cornisa que bordea la casa al nivel del acceso y que termina en el último peldaño de la escalera. Las fachadas son blancas y las esquinas muy ‘puras’, algo muy característico de la modernidad y de Loos en su huida del ornamento. Se observa también un remate en la cubierta pero muy sinuoso. Las cubiertas son claramente planas para que sean recorribles y el escalonamiento en el volumen general de la casa permite también ese uso.
Las ventanas contienen elementos tanto tradicionales como modernos. Sin embargo el hecho que no sean estrictamente ventanas corridas tampoco daría para decir que no son modernas ya que el uso de perfilería metálica y la disposición de los vanos en forma asimétrica e irregular nos ofrece elementos para hablar de modernidad.
Vemos también elementos como lámparas encima de ambas puertas en donde al igual que la baranda son puestas allí sin mayor pretensión y la solución constructiva de incrustarlas en la fachada refleja esa intención.
La falta de ornamento no solo crea una nueva estética sino que libera al trabajador de horas y horas de trabajo como dice Adolf Loos en su escrito ornamento y delito: ‘todavía mucho mayor es el daño que sufre el pueblo productor del ornamento. Como el ornamento ya no es producto natural de nuestra cultura, sino que señala un retraso o un síntoma de degeneración, el trabajo del ornamentista ya no es adecuadamente pagado.’ Más adelante nos dice: ‘el ornamento es fuerza de trabajo malgastada y, por ello, salud malgastada. Así fue siempre. Hoy, además, también significa material malgastado, y ambas cosas significan capital malgastado.’2.
Loos se puede relacionar con Hans Poelzig en cuanto este ultimo nos habla de que los problemas de la arquitectura moderna no se pueden resolver por medios puramente externos y tampoco en la huida de la herencia histórica. También nos habla del análisis intelectual que se debe llevar a cabo de los materiales ya usados y del dominio de la tradición para poder usar los nuevos. Y en Loos vemos un claro análisis de los materiales que lleva a que estos expresen lo que son y una relación intrínseca entre lo moderno y la tradición.
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Schezen. Roberto. Adolf Loos: Arquitectura 1903-1932. Editorial Gustavo Gili. Barcelona. 1996. Pp. 82
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Bibliografía
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Linea de tiempo vida y obra Adolf Loos
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