BARRIO KIEFHOEK (1925-29) ROTTERDAM - HOLANDA

Fuente: Oud, Jacobus Johannes Pieter, libro J.J.P Oud, Año 2000

LO PASADO, PISADO.

La demanda de espacios para habitar por parte de las crecientes comunidades obreras que llegan en búsqueda de mejores condiciones de vida, no cesa. En este momento la ciudad no da abasto para albergar sus nuevos habitantes y es necesario empezar  a explorar maneras eficientes, industrializadas y estandarizadas; Términos de los que se habla comúnmente en el tiempo moderno, para poder dar cabida a las personas. Rotterdam, al sur de los países bajos, comienza a consolidarse a ese tiempo como uno de los puertos más activos de Europa. Los barcos cada día en mayor número exigen una mayor mano de obra, la cual no puede ser traída desde lugares lejanos ya que esta no es una manera eficiente y genera perdidas de tiempo muy necesario. La ciudad en búsqueda de contrarrestar esto toma la decisión de aprovechar los terrenos cercanos al puerto para albergar la nueva comunidad obrera.

Jacobus Johannes Oud es consciente de las determinantes existentes, la ciudad necesita darle mayor eficiencia a cada metro cuadrado que tenga sin arriesgar la calidad de vida del habitante. Los terrenos cercanos al puerto están ocupados por viviendas unifamiliares comunes a las ya existentes en la ciudad; Con sus típicas paredes en ladrillos a la vista, sus techos cubiertos de tejas inclinadas y sus calles angostas y adoquinadas. Rotterdam necesita ser más eficiente y con esto, el proceso urbanizador moderno comienza su arremetida contra lo conocido como tiempo presente y lo empuja a ser del pasado. Oud genera un estándar, y la producción en serie de este cambia la manera en que las personas ven el habitar. Ya sus casas no serán únicas y sus espacios no serán fruto del capricho, sino de un movimiento que aprovecha el espacio de manera eficiente, sus techos cambiaran a ser planos y continuos, el ladrillo generador de contraste es cambiado por los muros lisos que dan percepción de unidad y homogeneidad, y sus callecitas le abren paso a unas nuevas, más amplias y mucho más eficientes.

Es así como este nuevo presente, como lo dice Leonardo Benévolo en su descripción de lo moderno, empuja lo conocido hacia el mundo del pasado usando la demoledora maquina de la arquitectura, que en este caso, a su paso dejó los rastros de lo que alguna vez fue lo moderno, y que ahora solo son ladrillos fruto de la demolición de las antiguas viviendas convertidas en un pasado ya pisado.

Barrio Kiefhoek (1925-29). Rotterdam – Holanda.

Fachada de la vivienda. Fuente: http://www.flickr.com/photos/-zmx-/5673419274/

Cocina proyectada por Oud para el conjunto Hoek van Holland (1924-1927). Fuente: Oud, Jacobus Johannes Pieter, libro J.J.P Oud, Año 2000

Salón y comedor de la vivienda con mobiliario de la época. Fuente: http://www.holland.com/es/turista/article/El-complejo-Kiefhoek.htm

Habitación amoblada con mobiliario de la época. Fuente: http://www.rotterdam010.nl/101-Overzicht-01/10/T-Monumentendag-09-09-2006-01.html

EL OBJETO MODERNO

La producción en serie de la vivienda  fue un proceso en el que muchos arquitectos hicieron hincapié durante los inicios del siglo XX. Las viviendas del barrio Kiefhoek reflejan un proceso inicial de la industrialización en Holanda y sigue los principios de la maximización del espacio con un mínimo de recursos (1), por lo anterior, estas viviendas presentan homogeneidad en sus materiales, aunque estos no son los comunes materiales modernos como el concreto y el acero. Oud nos enseña una arquitectura estandarizada con maderas y ladrillos recubiertos.

La primera impresión que tuve al ver una foto de estas casas fue la de preguntarme cosas como el porqué del color de la puerta, un rojo brillante, el porqué de colocar unos marcos de color amarillo a todas las ventanas y por qué todo tan liso y tan blanco(Imagen 1). Bueno, lo cierto es que el arquitecto es uno de los representantes más conocidos de el movimiento de stijl, el cual estaba encabezado por el pintor Piet Mondrian, y al que también pertenecía Theo Van Doesbourg. Al saber esto pude asociarlo con los cuadros de este pintor. El uso de estos colores en su mayoría primarios, los colores elementales del universo, es la muestra de un arte simplificado, un arte en el que sus elementos fueron reducidos para dar pasó a un arte puro (2). Oud toma estos principios y los aplica en el diseño de la fachada. El color blanco de los ladrillos recubiertos es el equivalente a un lienzo de pintura, a este le agrega una trama imaginaria que se hace evidente si trazamos líneas prolongando elementos como los lados de la puerta o los marcos de las ventanas. Esta trama regularizadora ordena la obra y mediante el uso de los colores puros nos da a entender que Oud no necesita de unas puertas pesadas en madera tallada como la de la mayoría de las casas de la época, sino que el arte fue reducido a su expresión más mínima y pura, y con un color rojo acentúa la existencia de esta puerta.

Adentrándonos en el objeto de Oud, podemos encontrar una cocina (Imagen 2). Ya los elementos se han transformado, las cocinas son estandarizadas, sus mesones son hechos en granito y sus medidas ya están normalizadas. La obra de Oud a diferencia de las obras del movimiento moderno alemán, no tienen grandes avances en el diseño de objetos de uso común, ya sean cucharas u ollas, debido a sus pocos recursos económicos, pero el arquitecto se las arregla para lograr que estos elementos, aunque no modernos, tengan una cabida en la cocina, esto mediante el uso de muebles móviles y corredizos que cumplen muchas funciones (3). Encontramos también que esta tiene todos sus muebles amarillos, y todo posa sobre unos muros de color verde.

La función del habitar requiere un espacio de descanso. Las habitaciones (Imagen 3) de la casa tienen un piso en madera, esto me imagino que es por la temperatura del lugar. El centro de esta es la cama, y al verla me pregunto si Oud, al momento de diseñar la casa la uso como módulo de esta. El ancho de una habitación es dos metros y una cama, como podemos verlo encaja perfectamente en ella. La cama está hecha en madera, nada fuera de lo normal y está acompañada por una silla del mismo material. Lo único de la habitación que presenta una variación importante es un mueble de color amarillo hecho en metal que sirve de guardarropas, esto siguiendo con el principio en el cual la casa tiene todos sus muebles de color amarillo.

Un único elemento me llamó la atención al ver una imagen del salón comedor (Imagen 4), y este fue una mesa de color azul. En la casa, no hay ningún otro elemento de color azul a parte de este. La mesa de comer esta acompañada de unas sillas también de color azul y con sus marcos en madera. Podemos ver unos muebles también amarillos que dan hacia el lado de la cocina y que sirven para almacenar cosas. Una estufa de calefacción en la sala da cabida para pensar en que la sala era un lugar de reunión, y efectivamente una alfombra tejida y la idea de una sala grande para disponer más camas me hacen pensar en esto. 

Theo van Doesbourg es uno de los arquitectos que más influye la manera de diseñar de Oud. Él como creador de los 17 puntos de la arquitectura neoplasticista nos da una importante herramienta para poder entender su obra: Ya sea desde el uso del color, las funciones que allí se proponen y hasta las formas. Nos hace ver una búsqueda de una arquitectura pura y funcional que busca apartarse de una costosa vida llena de tiempo perdido. Las circulaciones son claras y su arquitectura anti decorativa nos enseña que no por hacer una obra de arte se debe dejar de lado el pensamiento lógico y práctico (4). 

1. J.J.P. Oud, Un funcionalismo poético, 1890-1963, Pagina 15.

2. http://es.wikipedia.org/wiki/Piet_Mondrian

3. Theo van Doesbourg, libro los 17 puntos de la arquitectura neoplasticista, La subdivisión, año 1925, capitulo 9. 

4. Theo Van Doesburg, Tomado del libro de textos de arquitectura, Espíritu de la arquitectura contemporánea, año 1930, Paginas 142-145.

Vista aérea de la habitación

Detalle interior con mobiliario

Fachada correspondiente a la habitación

Foto original de la habitación

UNA HABITACIÓN OBRERA

El periodo del 1920 al 1925 abarca un amplio crecimiento industrial. El crecimiento a grandes pasos de la población exige a los arquitectos maneras eficaces para hacer de la construcción una solución y no un problema ante una débil economía y a una infraestructura golpeada (1). La vivienda y su transformación a la modernidad trae consigo cambios a las personas. Su función hasta ese momento única de ser contenedora de la vida y una obra de arte, seguirá siendo arte, pero un arte con lógica y con practicidad (2).

La mano de obra es fundamental para el desarrollo de la industria y por ende nace la necesidad de crear espacios para que esta habite y que al mismo tiempo haya una mejor calidad de vida para el trabajador. La vivienda obrara de Oud es un claro ejemplo de como la vida se puede llevar a cabo en maquinas de habitar, en las que el tiempo y el espacio se cuidan sin arriesgar la calidad arquitectónica. 

Para mí, el habitar moderno se basa en maximizar el trabajo y minimizar el espacio. El habitar juega un papel importante en el ahorro del tiempo, y este ahorro del tiempo se ve desde la nueva concepción del espacio hasta el diseño de los muebles. En la vivienda moderna no se hace necesario el ornamento, la simplicidad es un sello que tienen estas nuevas viviendas. Ornamentar genera tiempo y este genera gastos. El mobiliario es útil y no se presta para cosas caprichosas. Las camas cumplen la función de dormir y su fabricación es la unión de partes que vienen dadas por normativas en cuanto a su tamaño y su ensamble. El mantenimiento de una vida saludable lleva a que esta nueva vivienda cuente con mayor higiene, con espacios fáciles de limpiar, como los son superficies lisas y las cerámicas prefabricadas, con ventanas que permitan una circulación continua de aire y al mismo tiempo dejen entrar la luz natural. En planta encontraremos circulaciones claras y de fácil comprensión, en las que podemos ver por donde se accede a los espacios y leer claramente la función de estos. Las cosas comunes como los muebles que antiguamente solo eran diseñados para almacenar la ropa, ahora tienen múltiples puertas y distintos niveles para almacenar, sus espacios vienen diseñados para la ropa. En la vivienda moderna la vida no se da para cosas caprichosas. Todo lo que hay en esta nueva obra viene con una función dada y cada elemento que lo compone se puede leer como un todo y no como una parte individual.

(1) Walter Gropius, Tomado del libro de textos de arquitectura, industrialización de la construcción, año 1910, Pagina 34.

(2) Theo Van Doesburg, Tomado del libro de textos de arquitectura, Espíritu de la arquitectura contemporánea, año 1930, Paginas 142-145.

Juan David Díaz Silva