Nombre del Proyecto: Casa Clark
Nombre del Autor: Marcel Breuer
Por: Sebastian Estupiñan
UMBRAL
“Se
trata de una sutil especie de liberación de las contradicciones internas”
El
modo intemporal de construir. Cristopher Alexander
La
fotografía da cuenta de un espacio
abierto, limitado en la parte superior por una estructura aparentemente de
madera, un espacio que representado en planta, intenta dar una sensación de
interacción exterior-interior. Además, ubicado justo en frente de la escalera
de acceso a la casa lo que genera un ambiente de bienvenida. Este espacio,
junto con su opuesto, crean una división de actividades: acción que determina
la zonificación de espacios de dormitorio y espacios de actividades (social,
servicios).
Ahora, definidos estos aspectos, la descripción
de la fotografía se enfocará especialmente a los elementos que la componen.
Comenzaré por uno de los aspectos más importantes: la perspectiva y la altura.
La altura –a la que se toma la foto- está al pecho y el foco se encuentra dirigido
hacia el acceso de la casa, lo cual permite mostrar una perspectiva en la que
las vigas de la estructura en madera parecieran insinuar el eje que separa los
espacios en la casa. Elementos en fachada y el piso muy al estilo de Marcel
Breuer (una sensación bastante marcada al separar el plano -ventanal- entre el
exterior e interior, no sin dejar a un lado la relación entre estos).
El lugar en el que el fotógrafo se ubica para
plasmar la imagen es un espacio de transición en donde encontró una muy buena foto
que describe visualmente uno de los aspectos importantes en la casa, este
pasillo -si así se le puede llamar- rompe con la concepción de elemento de
conexión y de paso, crea una nueva alternativa en la transición; un espacio que
no sólo cumple la función de conectar las piezas del rompecabezas de la casa,
sino que se impone como uno de los lugares más llamativos[1],
además, una acción tal vez bastante consciente por parte del fotógrafo es la de
plasmar un fragmento del piso que parece estar hecho de un mismo material pero
con diferente tonalidad y textura, lo anterior marca el espacio exterior del interior.
Ahora, la transición que sucede en este espacio casi que convierte las
secuencia de abierto-cerrado-abierto en un umbral maximizado
por el color azul del piso y una amplia sensación de verde a los costados que
permite a la persona caminar por un espacio perfectamente concebido antes de
llegar al lugar de descanso.
[1] “Las estancias comunicadas entre si caracterizan su planta de
distribución y es precisamente el pasillo la pieza que vertebra este tipo de
organización. Estos pasillos y recibidores están amueblados son amplios y
capaces de atraer gran número de
actividades: son el lugar común de la casa.” Monteys, Xavier. Fuerte, Pere. 2001. CASA COLLAGE. Editorial Gustavo Gili.
Barcelona
CASA CLARK – MARCEL BREUER
Ben Schnall, Howlett Harbor,
Long Islan, New York. Pg 222. 4
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“Arquitectos, escultores,
pintores... debemos regresar al trabajo manual... Establezcamos, por lo tanto,
una nueva cofradía de artesanos, libres de esa arrogancia que divide a las
clases sociales y que busca erigir una barrera infranqueable entre los
artesanos y los artistas”
Walter Gropius.
Un hombre alto, bien
parecido, muy pulcro, traje elegante, vestía de negro en casi toda ocasión. Nacido
en 1902 en Pécs, Hungría, un hombre, un estudiante, un maestro. Marcel Breuer es su nombre, en principio
estudiante de la Bildenden Kunste en Vienna, luego estudiante en la Bauhaus de
Weimar.
Allí a sus 18 años vivía la
vida de artista, un personaje conocido por toda la escuela, no solo por las
fiestas y eventos especiales, sino que también por el talentoso chico que
demostraba ser a través de sus primeros proyectos, uno de ellos además de ser
sus primeras aproximaciones al que sería uno de sus talentos de toda la vida
fue la silla romántica africana, una silla tallada y pintada con sus propias
manos, silla que cuenta una historia muy particular, proyectada para la época
de celebración de disfraces, tiempo después de su ingreso a la escuela: Breuer
encontró en este proyecto una manera singular de dar una pequeña broma a su
profesora de diseño de ese momento, Gunta Stölzl, quien tiempo atrás le había manifestado
su fobia a los cadáveres, Breuer entonces aprovecho la oportunidad, y junto con
algunos amigos, en una tarde de celebración, cuando todos los chicos salían a
disfrazarse, se adelantaron , y aparecieron en el salón vacío algunos en el
piso y Breuer sentado en la silla romántica, mientras su profesora se giraba
para borrar el tablero, tal fue el susto que ella tuvo que perder la
celebración por el pequeño altercado.
Breuer a pesar de ser un
chico estudioso y serio acostumbraba a hacer bromas en las épocas de fiesta,
además que estos eventos en la escuela siempre eran practicados y preparados
con tiempo de anticipación, era tradición preparar decorados disfraces y
escenografías para las fiestas que fácilmente podían durar días.
Tiempo después entre algunas
celebraciones que se facilitaban por el carácter cerrado de la escuela, breuer
conoce a una hermosa chica, recién ingresada a la escuela que rápidamente tomo
un lugar importante en su vida, poco a poco se convirtieron en muy buenos
amigos y a medida que paso el tiempo, después de distanciarse un poco, Breuer
noto que esa hermosa chica de tez blanca y ojos claros, tenía un lugar más
importante que el de una amiga.
Durante algún tiempo Breuer
se distancio de la chica, que poco tiempo después de haber terminado el segundo
ciclo de la escuela tuvo que viajar con su familia.
Para ese momento Breuer
apenas acababa de finalizar el ciclo de la escuela y unas semanas después
ingreso como aprendiz de carpintería, para continuar así los conocimientos
adquiridos en el diseño mobiliario que enfatizo en el ciclo. En ese tiempo ya
casi con 24 años, Breuer comenzó a madurar su pensamiento y sus diseños, lo
cual tiempo después lo llevo a obtener la dirección del curso de carpintería da
la Bauhaus para el año 1925.
Algunos meses después Martha
Erps, la hermosa chica de años atrás volvió, como artista consagrado y solo en
busca de Breuer, que después de haber superado su despedida, pero sin
olvidarla, decide después de un año contraer matrimonio con la chica de tez
blanca y ojos claros.
Para ese tiempo, Breuer
comenzaba a mostrar interés por un nuevo material[1],
desarrollado por el fabricante de acero alemán Mannesmann, que encontró la
forma de comenzar a producir tubos de acero sin costura, el primero en permitir
doblar tubos sin romperlos en las uniones, algo que Breuer principalmente había
comenzado a observar en la fabricación de bicicletas “Alder”.
Con esta nueva iniciativa de
diseño Breuer comenzó a trabajar la fabricación de una nueva silla a partir de
dichos tubos, con un diseño del continua que al principio encerraba una forma
cuadrada y que al agregar algunos productos textiles como cueros daba una forma
ideal para el descanso del cuerpo, nombrada en un principio por Breuer como B 3
que después de un tiempo terminaría siendo nombrada como Silla Wassily[2],
diseño y estilo que partió en dos lo que se venía haciendo antes para generar
una nueva corriente artística en la historia.
[1] (BAUHAUS) “Estos materiales están ahí para señalar el paso del
tiempo y la ligazón con el lugar, la autenticidad del habitar. Nada más bello,
que lo que nos liga a la tierra y nada mas atractivo que el trabajo ARTESANAL
con esos mismos materiales”. Ábalos Iñaki. 2011. LA BUENA VIDA. Editorial Gustavo Gili
[2] “Aun así, no es solo la posición aristocrática lo que ha
prevalecido a la hora de resolver esta pieza. Hay en ella también una
aspiración de alejarse de una sumisión literal a los patrones ergonómicos funcionalistas,
no solo la calidad de la materia sino los recursos compositivos desplegados.”
Ábalos Iñaki. 2011. LA BUENA VIDA. Editorial
Gustavo Gili
Marcel Breuer On Wassily Chair 1926 |
EL UMBRAL
“Cada edificio adquiere su carácter de los patrones que siguen repitiéndose en él.”
El modo intemporal de construir. Cristopher Alexander
El presente ensayo tiene como objetivo establecer una conexión entre tres miradas diferentes, intentando al mismo tiempo Proponer una crítica sobre la arquitectura binuclear y, específicamente el caso de la Casa Clark de Marcel Breuer.
En primera instancia, el pensamiento del autor respecto a su arquitectura, el objetivo de vivificar los materiales y los elementos implícitos en la obra obtiene su atención y así mismo definen gran parte de sus gestos a la hora de proceder, además pensar en la construcción de sus edificios[1], la búsqueda de una división de las funciones de la casa a través de espacios de transición y de un estilo marcado en la mayoría de sus obras, enfatizando en la horizontalidad y la extensión de la casa en el paisaje. Características importantes en la arquitectura moderna visto más claramente en las obras del Arquitecto Frank Lloyd Wright.
Marcel Breuer logra una reflexión real de aquello que lo antecedía y aquello que significaba la arquitectura, la construcción y la utilización de materiales autóctonos para la interacción del edificio con su entorno como en el caso de los egipcios[2]. También tener en cuenta las características de lo que constituye el proyecto para la selección de sus materiales.
En una segunda apreciación encontramos al Arquitecto Carlos Martí Aris, con la idea de patio como punto central en el desarrollo del trabajo de Marcel Breuer, donde argumenta en Breuer una búsqueda reversible de lo que se venía proyectando con respecto a la casa mirador[3] y regresa a los conceptos de la casa patio. No obstante esta vez Breuer tampoco busca cumplir con lo ya hecho tiempo atrás, donde se tenía una horadación o excavación en el centro de una masa homogénea, lo cual se traduce a un lenguaje más de la época, que a partir de la reunión articulada de ciertas piezas entorno a un espacio libre da como resultado diversos grados de apertura, y produciendo finalmente un “hibrido entre la casa patio y la casa mirador”.
En tercer lugar, el Profesor Joachim Driller, investigador de la obra en casas unifamiliares de Marcel Breuer, habla del diseño binuclear como una alternativa donde hay dos módulos independientes, uno de ellos destinado para la zona social y otro destinado a los dormitorios, dichos nódulos unidos por un pasillo. De modo que la composición espacial está dada por “casa de dos módulos” donde se manifiesta una separación marcada de las actividades[4] del edificio en dos alas. Las teorías mencionadas anteriormente, aunque no confluyen en una misma, parecen conformar una sola, donde la arquitectura se construye a partir de distintas perspectivas; la creación de lugares vivos se completa y armoniza con un espacio determinante, intermedio en la constitución de esos dos módulos de los que habla Driller, el espacio del que nos habla Carlos Martí y que surge a partir de la innovación en el concepto de la Casa patio. En este caso, Marcel Breuer logra la concepción de un lugar realmente rico en su vivencia, creador y formador de la estructura de distribución de toda la Casa Clark, el lugar que pareciera dilucidar una partición en la vida diurna y nocturna, el espacio de transición entre los dos módulos, y que articula la casa de planta uno hacia la planta dos. Este espacio que esclarece un eje vertical de la casa y que en un eje transversal da la ilusión de ver como el exterior se introduce en el interior y como lo atraviesa, que visto en planta corresponde a los dos patios proyectados en torno a este espacio de articulación.
[1] “Que el mundo de
piedra sobre piedra, de panoramas, peso y material, de cubos pequeños o
grandes, de espacios más o menos amplios, de vanos soleados o en la sombra, de
todo el horizonte de edificios y ciudades… que todo ese mundo inanimado se
vivifique.” Papachristou, Tician, 1970, NEW BUILDINGS AND
PROJECTS - MARCEL BREUER, Editorial Gustavo Gili.
[2] “¿Qué otro
periodo del pasado tuvo la audacia de inclinar un triángulo de más de 200
metros de largo contra otro de igual longitud? Osadía e inspiración inherentes
a las grandes dimensiones. El tamaño físico es una relación por sí; no necesita
nada en su apoyo, ni ninguna modulación ornamental: una continua textura pétrea
solo rodeada por el cielo, la arena y la roca.” Papachristou,
Tician, 1970, NEW BUILDINGS AND PROJECTS - MARCEL BREUER, Editorial Gustavo
Gili.
[4] “se opone al concepto de casa mirador, desarrollado por la cultura
moderna, cuyo perímetro está formado por una piel que transpira en toda su
extensión y se abren mediante grandes perforaciones al paisaje.” Martí Aris, Carlos, 2005, LA CIMBRA Y EL
ARCO, Fundación Caja de Arquitectos.
[4] “la quintaesencia de esta sugestiva línea argumental era la
constatación, no del todo nueva, de que la funcionalidad y belleza de un
edificio, independiente de su tamaño,
siempre se basa en su capacidad minuciosamente ponderada para cumplir las
funciones a la que está destinada” Vitra Desing Museum, 2003, MARCEL BREUER
DISEÑO Y ARQUITECTURA, Vitra Desing Stiftung.
LINEA DEL TIEMPO
PLANOS Y MAQUETA
BIBLIOGRAFIA
Papachristou, Tician, 1970, NEW
BUILDINGS AND PROJECTS - MARCEL BREUER, Barcelona, Editorial Gustavo Gili.
Monteys, Xavier. Fuerte, Pere. 2001. CASA COLLAGE. Barcelona. Editorial Gustavo Gili.
Ábalos Iñaki. 2011. LA
BUENA VIDA. Barcelona, Editorial Gustavo Gili
Breuer, Marcel, 1921- 1961,
BUILDINGS AND PROJECTS, Frederick A. Praeger
Argan, Giulio Carlo, 1957, MARCEL
BREUER Industrial Desing & Arquitecture, Gorlich editore Milano.
Argan, Giulio Carlo, 1957, WALTER
GROPIUS Y La Bauhaus, Gorlich editore Milano.
Martí Aris, Carlos, 2005, LA CIMBRA Y EL ARCO, Fundación
Caja de Arquitectos.
Hola, me gusta mucho el contenido y la información, de casualidad no tienes las medidas de la casa clark, me ayudaria mucho, gracias
ResponderEliminarBelaescobar12@gmail.com