Nombre del Proyecto: Cabins for the Sahara
Nombre del Autor: Yona Friedman
Por: Sebastian Bedoya
Habitar
lo inhabitable
La imagen es un sketch del
autor Yona Friedman. Fue escogida por representar la primera y última frontera
de la adaptabilidad humana; el desierto.
A simple vista se observa un
paraje desértico, con un enorme sol
abrazador y una sucesión de volúmenes rectangulares, dispuestos unos encima de
otros. Los cuerpos rectangulares se protegen de la radiación solar con una
cubierta de superficie ondulada, permite la ventilación y produce sombra, vital
en las tierras de clima caliente.
También se puede observar a
unas cuantas personas dialogando, un auto estacionado, un hombre observando el
panorama desde un segundo nivel y unas torres metálicas, probablemente de
extracción petrolera.
Es difícil entender por qué
habitar un paraje desolado, castigado por el incesante sol que baña las doradas
arenas del desierto, sin absoluto contacto con la civilización, y sin ningún
germen de vida que haga auto sostenible el proyecto, como lo puede ser las
tierras cultivables.
A pesar de que se
pueden intuir actividades industriales
al observar las torres en la parte inferior derecha, ¿cuál ha sido la intención
del arquitecto al diseñar este proyecto en este lugar? ¿Por qué construir
unidades habitacionales en la nada?
Al ser un esquema, es
importante entender la mente del creador para saber la razón por la cual
decidió hacer el proyecto, y para intentar entender un poco el motivo del
diseño se debe recurrir al pensamiento del arquitecto Yona Friedman, que
expresa en su libro, Utopías Realizables:
‘’…un occidente campesino,
poco habitado y el Sahara densamente poblado… El Sahara es una zona, que está
en su gran mayoría despoblada, y conforme aumente la población mundial, debería
ser habitada paulatinamente. En contraste las zonas agrícolas actuales, que son
usadas para vivienda, deberían deshabitarse para poder utilizarse de manera más
eficiente.’’ (Friedman, 1977)
La habitabilidad de un lugar
no se realiza exclusivamente en condiciones favorables, en ciertas ocasiones
adversas, las dificultades resultan ser oportunidades que demuestran la adaptabilidad
humana.
Sebastian
Bedoya, 1958, http://www.yonafriedman.nl, Cabins for the Sahara, Yona Friedman
Consultado:
06/03/13
|
El
vacío entre el pasado y el futuro
El ambiente que nos envuelve
representa nuestra realidad personal, es un reflejo y una extensión de nosotros
mismos, nos apropiamos de lo que nos rodea como si fuese una parte más del
cuerpo.
Yona Friedman es el hombre de
la imagen. Un señor meditabundo, que observa el vacío.
¿Pero cuál vacío?
¿Cómo podríamos responder la
pregunta si no conocemos al autor, ni sus razones, ni su contexto cultural,
político, artístico?
Intentando entender la razón
de su vacío, lo observamos bien por un instante, y lo primero que vemos, es que
Yona Friedman es un señor de edad avanzada, que ya ha vivido bastante, y conoce
demasiadas cosas sobre este mundo, buenas y malas.
Friedman, nació en Budapest,
Hungría, cuatro años después de la desintegración del imperio austrohúngaro,
gracias al tratado de Saint Germain; su infancia y juventud debieron estar muy
marcadas por el sistema de gobierno autoritario de Miklós Horthy. Eso es
difícil de saberlo, pues de su infancia no se habla nada.
Sus estudios universitarios
se vieron interrumpido por la segunda guerra mundial, y se sabe que este evento
fue fundamental para él, porque huyo de su país y emigró a Israel, donde
terminó sus estudios.
En Israel, vivió la
experiencia de ser refugiado, y entendió que la guerra era un mal provocado por
el egoísmo propio de cada cultura. Y eso le enseño nuevos valores que hasta
entonces él desconocía.
Ahora Yona Friedman, era un
hombre sin una cultura propia, vagabundo de un mundo entristecido por la
realidad violenta de la humanidad.
Sin cultura propia, se puede
entender porque en la habitación donde se encuentra Yona Friedman tiene tantos
objetos de otras culturas, tal vez así, el intentó llenar el vacío que le había
dejado no pertenecer a ningún lado.
Al ser una persona sin
identidad, y explorar varias comunidades diferentes, pudo entender que el
futuro de la humanidad estaba en la unión de las personas aceptando sus
diferencias, trabajando unidos para el bienestar general de la sociedad, no
para el beneficio propio.
Y esto se ve reflejado en su
obra, la cual nunca buscó la fama personal, sino la explicación de ideas de
sociedades futuristas utópicas.
Su visión futurista utópica
no es tan imposible, en su libro Utopies Rèalisables expresa “…Existen utopías
desde el principio del mundo…nacen de la insatisfacción colectiva…presuponen la
existencia de un técnico o de conductas aplicables…se hace factible, sólo si conducen
a un convenio colectivo…”1
La arquitectura que propone
Friedman para las ciudades no es utópica, él expresa “nos daremos cuenta de que
la ciudad en sí es una utopía, tal vez la primera utopía humana. Parece obvio
que el objetivo en la mayoría de las utopías para el mejoramiento de esta
organización es la ciudad”2
Tal vez habla del futuro en
sus obras, porque el espera que el futuro sea mucho más agradable que el pasado
violento de la humanidad, y tal vez espera que las personas puedan convivir de manera
pacífica los unos con los otros en un tiempo posterior al nuestro, pero lo que
sí es seguro, es que él entiende que un cambio en la forma de vivir ciudad
depende de la comunidad que la habite.
En resumen, la foto expresa
a un hombre pensativo, probablemente imaginando otra época distinta a la nuestra, quizás en un
pasado violento, en el cual vio como muchas personas eran expulsadas de sus
tierras, o perdían su hogar por la guerra; o quizás Friedman este en un futuro,
lejano, ya no tan lejano, en el cual la humanidad habrá aprendido a convivir de
manera racional, lógica, y porque no, pacifica.
También podemos ver a un
Yona Friedman seguro de su lugar, apoyado de manera fuerte, con una mano hacia
atrás, descolgada que tal vez indica que
no se ha olvidado de lo que ha pasado, pero que ya no puede hacer nada para
cambiarlo, pero también, con una mano adelante, tocando la mesa, que indica que
la acción está en el trabajo presente.
En el muro que da la espalda
a Friedman, se ven trabajos de otras comunidades, queriendo indicar que las
otras culturas son tan importantes, como la cultura de la cual proviene.
Esto fue importante para el
desarrollo de su pensamiento arquitectónico.
Tal vez nunca se logre
establecer la razón por la cual Friedman observa el vacío de esa manera, pero
lo que sí es claro es que Friedman es un hombre que logra unir el puente entre
pasado y futuro de manera audaz, a través de su propia realidad.
Yona Friedman recuerda de
donde viene, pero también sabe muy bien, a donde va.
1(Friedman, 1977) UtopiesRèalisables
Barcelona Ed. Gustavo Gili S.A. pág. 5,12
2(Friedman, 1977) UtopiesRèalisables
Barcelona Ed. Gustavo Gili S.A. pág. 170
Sebastian
Bedoya ,23/08/2012,
Cabins
for the Sahara, Yona Friedman
Budapest,
(Hungría) 5 de Junio de 1923
|
De la arquitectura utópica a la
arquitectura desechable
Cabins for the Sahara es un
proyecto que el autor Yona Friedman a autodenominado “tecnología simple para el mundo pobre”.1
El proyecto de Friedman, es
descrito por el propio autor como una construcción bajo unos parámetros muy
definidos, como resulta ser el material, la disposición de los elementos, su
ubicación geográfica, entre otros.
Aunque a pesar que el
proyecto fue concebido como una obra autoconstruida por las mismas personas que
lo habitaran, a pesar que no requiere grandes recursos económicos, ni una mano
de obra especializada, este proyecto está catalogado como obra utópica, nunca
fue realizada ni construida.
Pero, ¿Cuál es la razón, por
la cual se habla de utopía en esta obra?, si en las palabras del autor, es un
ejercicio muy básico, que solucionaría problemas de vivienda temporal para
determinadas regiones y sociedades.
Para entender cualquier
obra, se podría buscar la información en los textos sobre ella, y así podríamos
identificar la razón por la cual se clasifica de utópica, pero no hay
demasiada, por no decir ninguna referencia bibliográfica del proyecto.
Así que entender la obra
desde textos es inviable para este ejercicio. Entender el proyecto desde el
proyecto, no podría explicar la razón de su concepción y la razón de su
catálogo de obra utópica, por esta razón para entenderlo, es necesario
encontrar otros autores que hablen de obras paralelas, que tengan relación con
Cabins for the Sahara.
Y en este punto vale la pena
remitirse al Archigram, un movimiento futurista, que proponía construcciones
utópicas; a pesar que el trabajo de Friedman difiere del trabajo Archigram, no
remitiremos a ellos desde el punto de vista utópico.
“El Archigram y los arquitectos tecnológicos lanzaron un reto histórico
al entrar en el mundo de la producción industrial, sin reparos ni exigencias de
un trato especial. La arquitectura ha de ser un producto industrial más”2
El
párrafo anterior señalaba que una de las razones por la cual no se llevan a
cabo las obras utópicas, es por su condición de producto industrial. El
Archigram se catalogaba así mismo como una arquitectura desechable, un objeto
de consumo.
“Warren Chalk, en un escrito suyo de
1967 titulado <<La arquitectura como producto del consumidor>>,
plantea claramente la necesidad de una arquitectura desechable, intercambiable
y producible como cualquier otro objeto de consumo, defendiendo
una<<estética de los desperdicios>> Chalk considera que <<un
producto más apto para el consumidor debe ofrecer algo mejor y distinto que la
vivienda tradicional… en la segunda mitad del siglo XX, los viejos preceptos
resultan extrañamente irrelevantes y los viejos dogmas han perdido validez.
Buscamos una idea, un nuevo idioma
vernáculo, algo que nos aproxime a las capsulas espaciales, a los ordenadores y
a los envases desechables de esta era atómico-espacial>>”3
En
la época en la cual se proyecta Cabins for the Sahara y el Archigram nace
como movimiento, el mundo está pasando
por una etapa postguerra, que veía sobre sus cabezas la posibilidad de una
guerra aniquiladora en cualquier momento.
Pese
a ello la tecnología era una gran aliada, y el espíritu de consumo, generaba la
necesidad de estar constantemente cambiándola.
Es
importante entender que la tecnología es un arma de doble filo, que tenía el
mundo al borde de la extinción, pero que también mostraba infinidad de posibilidades
y herramientas que el hombre moderno necesitaba para su consumo.
Autores
como Chalk, hablan de la posibilidad de generar arquitectura que evolucione con
las necesidades de consumo y tecnología, esta descripción dada por el autor de
arquitectura futurista encajan perfectamente con el Archigram, y en menor
medida con el proyecto Cabins for the Sahara.
El
problema del Archigram y de Cabins for the Sahara, no está en la producción
industrial, en la economía, en la sociedad, en la política o en la cultura, el
verdadero problema radica en una cuestión ideológica, una concepción de la
arquitectura.
La
razón por la cual Cabins for the Sahara es una utopía es, porque relega a la
arquitectura a un envase desechable, un producto adquirible y desperdiciado.
La
arquitectura es vista como un recipiente duradero en el tiempo, un objeto hecho
a la medida del hombre, hecho para su bienestar, no un bien desechable, no es
un producto que se consigue, se utiliza y luego se deshace para conseguir otro,
o por lo menos es la visión de la época, lo cual a los ojos de la sociedad del
momento construir un objeto habitable temporalmente es visto como utópico.
Pero
según el mismo Friedman, “planteamientos
utópicos solo resultan utópicos para los personajes de determinado espacio y
tiempo, pero cuando toda la sociedad trabaja en la idea, se convierte en una
realidad”4, actualmente se observa la tendencia al cambio con
mayor frecuencia, y se observa a una sociedad que consume más y más, es
cuestión de tiempo, para que la utopía de la arquitectura desechable se haga
realidad, y planteamientos como los de Yona Friedman se lleven a cabo.
2,3(Montaner, 2002) Después del movimiento
moderno Arquitectura de la segunda mitad del siglo XX Barcelona Ed. Gustavo
Gili S.A. pág.115, pág 113
4 (Friedman, 1977) Utopies Rèalisables Barcelona Ed.
Gustavo Gili S.A. pág. 10
No hay comentarios:
Publicar un comentario