ARQUITECTO LOUIS ISADORE KAHN
CASA FISHERPOR: DAVID RICARDO CORTES
UNO DE LOS 7 SABIOS DE GRECIA: LA HUMILDAD COMO FILOSOFÍA DE LOUIS ISIDORE KAHN:
Nace el 20 de febrero de 1901 en Osel, Estonia. Arquitecto graduado de la Universidad de Pennsylvania, filósofo y escritor empírico, que a los cuatro años de edad emigra con su familia a Estados Unidos en donde es educado en una tradición Beaux-arts. Ya en Estados Unidos, Kahn se convierte en profesor de La Universidad de Pennsylvania y de la Universidad de Yale, y entre sus alumnos más destacados se encuentran Moshe Safdie y Robert Venturi. A lo largo de su vida tuvo tres familias con tres mujeres diferentes: su esposa Esther, su compañera de trabajo Anne Tyng, y con Harriet Pattison”[1]. Anne Tyng es a su vez arquitecta, con la que Kahn trabajó en el concepto de la “Ciudad Torre”. Regresando de un viaje por la India, muere el 17 de marzo de 1974 en la estación de Pennsylvania en New York. En la foto, Kahn se encuentra en clase con un grupo de estudiantes de la Universidad de Pennsylvania en el año de 1967. Reconoce que al lado de sus alumnos crece como arquitecto, citando el siguiente comentario:
“Aprendo más de los estudiantes de lo que yo probablemente enseño”[2] en palabras de Kahn, expresa en primer lugar la humildad, como virtud que tiene para entender que no se es lo suficientemente viejo para aprender ni lo suficientemente joven para enseñar; en segundo lugar se puede deducir que él está presto, con una mente abierta, a atender nuevas visiones, pensamientos, ideas, etc., que de alguna manera subyacen en aquellos que hasta ahora aprenden lo que es Arquitectura, y que en su pensamiento aún divergente se puede ramificar el conocimiento; y en tercer lugar, se ve a un personaje infinitamente humano, que entiende la manera asertiva de llegar a los demás, a partir de la paciencia y la prudencia, cualidades de un verdadero pedagogo, de un sabio.
La foto escogida expresa el empeño de Kahn al enseñar a sus estudiantes el correcto camino de la visión de cada uno, aparte que se puede entender una manera correcta de orientar la energía que recorre a la juventud para construir con ellos el porvenir, partiendo de sus ideales. Kahn, al igual que todo lo que hacía, se lo tomaba con mucha seriedad y madurez, por lo cual enseñar era una tarea de mucho esfuerzo, ya que los profesores son los responsables de direccionar a aquellos que serán partícipes del mañana, y, extrapolando esto a sus obras de Arquitectura, nos enseña su camino, y nos orienta a nosotros los estudiantes sobre el orden y la esencia de las cosas, la cual es su propia visión[3].
Quisiera resaltar como elemento primordial de la foto: el lápiz. Hasta donde la foto permite visualizar, Kahn sólo parece usar el lápiz para señalar alguna situación particular de un proyecto, pero no se puede decir que raya sobre el papel. Así, entendiendo el papel como medio para plasmar las ideas y las visiones, que son en sí la esencia del pensamiento, Kahn respeta estas individualidades, y, tiene las más sinceras intenciones de criticar en el buen sentido los proyectos, mas no rayar las ideas de sus estudiantes. Por tanto, refuerzo la idea de Kahn como un gran hombre, de mucho valor y de buen corazón. La idea de este respeto hacia los demás se sustenta en que Kahn entendía que la Universidad era una institución en la cual se compartía el conocimiento entre todos, ya que, no todos conocemos lo mismo, y partiendo de ello todo mundo tiene el derecho de enseñar a los demás lo que cada uno conoce por su propia experiencia.
Kahn sabía que los hombres podían entenderse entre ellos si se tenían tolerancia e intentaban escucharse, de ahí que Kahn antes de pronunciar alguna palabra escuchaba, entendía, pensaba y se comunicaba, resumiendo todo en un “Cogito ergo sum” o “Pienso, luego existo”; al hacer este proceso, Kahn podía llegar a una sabiduría alcanzable por pocos, “el acto consciente”. Un beneficio que se gana con una sabiduría de este talante, es saber cuándo uno se equivoca y cuándo se acierta, con ello se exalta una vez más su humanidad. Humanidad que se ve plasmada en todos sus proyectos, desde el más pequeño, hasta el más grande, y también en lo que se comprende como el tacto humano.
Pero no necesariamente la sabiduría es saber convivir, en contraste, es saber vivir (en analogía, saber convivir es a pienso, como saber vivir es a existo): tomando como verdad que Kahn poseía este don, tal vez él pueda extrapolar este saber vivir a las casas, en especial a la casa Fisher. La casa Fisher se construye en un barrio en donde la ciudad de Frank Lloyd Wright se hace evidente, es decir la “Broadacre City”; las casas vecinas al proyecto son de tipología aislada, en donde la arborización “inunda los barrios y la ciudad con naturaleza”. Partiendo del hecho que la casa Fisher se planteó como una casa binuclear o compuesta por partes y que se ubica en una ciudad de casas aisladas, se llega a la conclusión que debe haber una dicotomía de escalas para alcanzar un equilibrio en la casa: a escala urbana, la casa Fisher necesariamente debe convertirse en una casa aislada, para poderse acoplar a su entorno base y en sí a la disposición natural de los árboles (convivir), y a escala arquitectónica ya puede “vivir” como una casa compuesta por partes.
Kahn tenía una gran capacidad para hablar poco, vivir mucho y pensar infinitamente, es decir, las capacidades de un sabio, ya que siempre cuando interactuaba con cualquier persona, primero escuchaba y después hablaba (de hecho Kahn debió aprender escuchando mucho más de lo que él enseñaba hablando), condicionado por un precedente vivencial, por lo cual se puede decir que era un maestro de arquitectura, de filosofía y, por supuesto, de vida.
“Aprendo más de los estudiantes de lo que yo probablemente enseño”[2] en palabras de Kahn, expresa en primer lugar la humildad, como virtud que tiene para entender que no se es lo suficientemente viejo para aprender ni lo suficientemente joven para enseñar; en segundo lugar se puede deducir que él está presto, con una mente abierta, a atender nuevas visiones, pensamientos, ideas, etc., que de alguna manera subyacen en aquellos que hasta ahora aprenden lo que es Arquitectura, y que en su pensamiento aún divergente se puede ramificar el conocimiento; y en tercer lugar, se ve a un personaje infinitamente humano, que entiende la manera asertiva de llegar a los demás, a partir de la paciencia y la prudencia, cualidades de un verdadero pedagogo, de un sabio.
La foto escogida expresa el empeño de Kahn al enseñar a sus estudiantes el correcto camino de la visión de cada uno, aparte que se puede entender una manera correcta de orientar la energía que recorre a la juventud para construir con ellos el porvenir, partiendo de sus ideales. Kahn, al igual que todo lo que hacía, se lo tomaba con mucha seriedad y madurez, por lo cual enseñar era una tarea de mucho esfuerzo, ya que los profesores son los responsables de direccionar a aquellos que serán partícipes del mañana, y, extrapolando esto a sus obras de Arquitectura, nos enseña su camino, y nos orienta a nosotros los estudiantes sobre el orden y la esencia de las cosas, la cual es su propia visión[3].
Quisiera resaltar como elemento primordial de la foto: el lápiz. Hasta donde la foto permite visualizar, Kahn sólo parece usar el lápiz para señalar alguna situación particular de un proyecto, pero no se puede decir que raya sobre el papel. Así, entendiendo el papel como medio para plasmar las ideas y las visiones, que son en sí la esencia del pensamiento, Kahn respeta estas individualidades, y, tiene las más sinceras intenciones de criticar en el buen sentido los proyectos, mas no rayar las ideas de sus estudiantes. Por tanto, refuerzo la idea de Kahn como un gran hombre, de mucho valor y de buen corazón. La idea de este respeto hacia los demás se sustenta en que Kahn entendía que la Universidad era una institución en la cual se compartía el conocimiento entre todos, ya que, no todos conocemos lo mismo, y partiendo de ello todo mundo tiene el derecho de enseñar a los demás lo que cada uno conoce por su propia experiencia.
Kahn sabía que los hombres podían entenderse entre ellos si se tenían tolerancia e intentaban escucharse, de ahí que Kahn antes de pronunciar alguna palabra escuchaba, entendía, pensaba y se comunicaba, resumiendo todo en un “Cogito ergo sum” o “Pienso, luego existo”; al hacer este proceso, Kahn podía llegar a una sabiduría alcanzable por pocos, “el acto consciente”. Un beneficio que se gana con una sabiduría de este talante, es saber cuándo uno se equivoca y cuándo se acierta, con ello se exalta una vez más su humanidad. Humanidad que se ve plasmada en todos sus proyectos, desde el más pequeño, hasta el más grande, y también en lo que se comprende como el tacto humano.
Pero no necesariamente la sabiduría es saber convivir, en contraste, es saber vivir (en analogía, saber convivir es a pienso, como saber vivir es a existo): tomando como verdad que Kahn poseía este don, tal vez él pueda extrapolar este saber vivir a las casas, en especial a la casa Fisher. La casa Fisher se construye en un barrio en donde la ciudad de Frank Lloyd Wright se hace evidente, es decir la “Broadacre City”; las casas vecinas al proyecto son de tipología aislada, en donde la arborización “inunda los barrios y la ciudad con naturaleza”. Partiendo del hecho que la casa Fisher se planteó como una casa binuclear o compuesta por partes y que se ubica en una ciudad de casas aisladas, se llega a la conclusión que debe haber una dicotomía de escalas para alcanzar un equilibrio en la casa: a escala urbana, la casa Fisher necesariamente debe convertirse en una casa aislada, para poderse acoplar a su entorno base y en sí a la disposición natural de los árboles (convivir), y a escala arquitectónica ya puede “vivir” como una casa compuesta por partes.
Kahn tenía una gran capacidad para hablar poco, vivir mucho y pensar infinitamente, es decir, las capacidades de un sabio, ya que siempre cuando interactuaba con cualquier persona, primero escuchaba y después hablaba (de hecho Kahn debió aprender escuchando mucho más de lo que él enseñaba hablando), condicionado por un precedente vivencial, por lo cual se puede decir que era un maestro de arquitectura, de filosofía y, por supuesto, de vida.
[2] Parte de texto de BROWNLEE, David. DE LONG,
David. "Louis l. Kahn", Ed. Rizzoli International Publications, New York, 1991 (pp.
62).
[3] Parte de texto de las
frases de Louis Kahn tomada de: MARCHAN, Simón. "La Arquitectura del Siglo
XX -Textos-", Ed. Simón Marchan Fiz; Compilación El Orden Es, 1960 (pp.
423).
Tomada de: BROWNLEE, David. DE LONG, David. "Louis l. Kahn", Ed. Rizzoli International Publications, New York, 1991 (pp. 62).
REACONDICIONANDO UN TIPO A UN LUGAR
La casa Fisher se basa en la rotación de un cubo con respecto al otro, interceptados entre sí. Este ejercicio de composición de rotación e intersección de volúmenes (Fig. 1)[1], posiblemente aprendido por Louis Kahn en su viaje por Europa, exactamente de los castillos medievales, es su estandarte en una gran mayoría de sus obras de arquitectura. Si bien el concepto es extendido en la mayoría de sus obras, en la casa Fisher son primordiales varios factores: La casa aislada, la separación de espacios privados y espacios sociales, la materialidad y el lugar.
La casa Fisher empieza a desarrollarse como un juego formal, que va a dar como resultado un tipo reacondicionado en la modernidad partiendo de que “Kahn desarrolla la noción de un conjunto de dos volúmenes, uno servido y el otro de servicio”[2], Pero en la casa Fisher se desarrolla a partir de la separación de privacidad (Fig. 2)[3]: El concepto de la casa Fisher toma fuerza en el momento en el que propone en la casa compuesta por partes y que a la vez es aislada, se convierte en una casa binuclear, que ayuda a la separación de esta, el eje central del acceso.
El desarrollo de la casa aislada, se concibe a partir del desarrollo urbanístico dado en el barrio en Hatboro: casas que tienen un área de 1/5 con respecto al lote. La casa Fisher por ende es de esta manera, pero eso no es para reducir una arquitectura definida en la casa, es ahí donde Kahn desarrolla una integración entre la casa y la vegetación a partir de “abrir la casa hacia el exterior”. Los árboles como entes fundamentalmente propios y formadores del lugar, condicionan a la casa desde una materialidad definida, hasta una ubicación de ciertos espacios hacia ciertas direcciones. Tanto así que un árbol, el más importante del lugar, “entra” a el espacio interior de la doble altura y es lógico que cuando dos cosas se acoplan y se difuminan entre sí, están realizadas con el mismo orden, entonces naturaleza = casa.
La materialidad de la casa hace recordar inevitablemente dos factores comparables con respecto a la textura y el color: La piedra como basamento y la madera como el “Volumen Elevado” y mirando esta concepción de pesadez del basamento en contraposición a la ligereza de la madera, hace recordar el concepto de la planta libre, interpretado según el lugar con la casa Fisher (Fig. 3)[4].
La planta libre desarrolla la ligereza en la planta inferior y la pesadez en las demás plantas formando un gran volumen, pero en la casa Fisher es totalmente al contrario. ¿Por qué? Basta con mirar el lugar: En primera instancia, el terreno inclinado hace necesario que se genere una manifestación visual de algún sistema portante, en este caso la piedra se hace notar como un basamento macizo, como si la casa se hubiera construido con la piedra del lugar. En segunda instancia, un árbol posee un basamento que es la raíz (Fig. 4 y 5)[5], al igual que cualquier construcción, en consecuencia la base es parte fundamental de ese orden natural que debe ser, el orden es.
La casa se inserta en la historia de la arquitectura, mostrando una nueva visión organizativa en donde según Enzo Fratelli “Kahn ha ido más allá de los esquemas del funcionalismo en cuanto a distribución”[6], pero no hay que olvidar el gran trabajo que este maravilloso hombre hizo condicionado bajo el descubrimiento del orden absoluto.
[1]
http://es.wikiarquitectura.com/images/thumb/7/7a/Fisher_planta_baja.jpg/481px-Fisher_planta_baja.jpg
(07/01/2012)
[2] FRAMPTON, Kenneth.
"Historia Crítica de la Arquitectura", Ed. Gustavo Gil, S. A. GG;
Barcelona 1981 (pp. 245).
[3]
http://es.wikiarquitectura.com/images/thumb/f/fd/Fisher_primera_planta.jpg/590px-Fisher_primera_planta.jpg
(07/01/2012)
[4]http://es.wikiarquitectura.com/images/thumb/6/66/Fisher_ubicacion_en_plano.jpg/800pxFisher_ubicacion_en_plano.jpg
(07/01/2012)
[5]http://www.urbipedia.org/images/thumb/a/aa/Khan.Casa_Norman_Fisher.Planos6.jpg/800pxKhan.Casa_Norman_Fisher.Planos6.jpg
(07/01/2012)
[6] FRAMPTON, Kenneth.
"Historia Crítica de la Arquitectura", Ed. Gustavo Gil, S. A. GG;
Barcelona 1981 (pp. 241).
DESAPERCIBIDA
Lo moderno se expresa en esta casa, no como la regularización y estandarización del vivir, sino en la manera como la casa se mimetiza y se adapta al orden ya preestablecido, demostrado en que la casa se encuentra confinada entre la naturaleza en horizontal y por el cielo y la tierra en vertical, la casa se vuelve parte del lugar. En esta casa se demuestra que la arquitectura no necesariamente se puede ni debe adaptar solamente a las necesidades de la humanidad, también se puede y debe adaptarse a las necesidades de la naturaleza, dando así una pauta simbólica a los desarrollos de la arquitectura sostenible.
La propuesta moderna y novedosa que Louis Kahn realiza y se refleja en la foto, se basa en entender el mundo en el que vivimos (el orden natural), aquella condición que la mayor parte de la arquitectura dejó en el olvido cuando llegó la industrialización y el nuevo modo de vivir. La naturaleza se entiende en la casa Fisher no como un enemigo el cual ataca algo que no es de su comprender, todo lo contrario, se entiende como aquel que le da el carácter de ser como es; el mismo orden creó el elefante y creó el hombre: son diseños diferentes indicados desde diferentes aspiraciones formados de diferentes circunstancias[1]
Orden único que da el lugar, que obliga a crear una arquitectura adaptable al medio, representado ya desde los materiales: la piedra como basamento, y la madera, parte física de los arboles; el basamento de piedra que en la fotografía se ve rugoso son las bases del edificio, en analogía, las raíces son las bases de los árboles; y la madera en el edificio es el artificio (creado por el hombre) del árbol. Esta es otra pista que Kahn deja en la casa Fisher para entender la forma de ser de la forma con base en donde esté.
Entonces, se puede entender que hay un fuerte combate que crea Kahn para defender la naturaleza contra la industrialización que viene consumiéndola como producto material. Kahn reorienta esa mirada desde la conciencia y desde entender a la naturaleza como elemento contemplativo y arquitectónico. Ser moderno no necesariamente significa hacerle una “apología” a la máquina lo cual en mi concepto interpretaron todos los “maestros” de la modernidad, en cambio es seguir aquél orden puro, simple y perfecto, totalizándolo parcialmente en nuestras vidas, este orden es sencillamente para Kahn esa naturaleza acogedora y apreciable que desde antes de que el hombre tuviera razón ya estaba ahí.
La casa Fisher encuentra su perfección (en cuanto a entender el lugar) cuándo se pierde en el ambiente, pasa desapercibida, es decir, se apropia de la alienación que poseen los entes alienados del lugar, desde las casas vecinas y los árboles aislados que forman un conjunto, comprendiendo así que posiblemente Kahn estaría de acuerdo con Loos en que la casa debe ser conservadora, pero agregando, el conjunto de casas también lo debe ser.
[1] Parte de texto de
las frases de Louis Kahn tomada de: MARCHAN, Simón. "La Arquitectura del
Siglo XX -Textos-", Ed. Simón Marchan fiz; Compilación El Orden Es, 1960
(pp. 423).
Tomada de: GIURGOLA, Romaldo. "Louis l. Kahn", Ed. Gustavo Gili, Barcelona, 1980 (pp. 23).
Imagenes y planos Casa Fisher
Primera planta: Cocina, Comedor, Sala, Habitación PPAL+ Baño, Baño zona social.
Segunda planta: Zona social a doble altura, 2 Habitaciones, Baño, Estudio.
FIG. 3: EL LUGAR: como condiciones del lugar se tiene un río, un terreno inclinado, la calle y los árboles
FIG. 4: FACHADA CON MANIFESTACIÖN DEL BASAMENTO
FIG. 5: FACHADA SIN MANIFESTACIÖN DEL BASAMENTO
Primera planta: Cocina, Comedor, Sala, Habitación PPAL+ Baño, Baño zona social.
Segunda planta: Zona social a doble altura, 2 Habitaciones, Baño, Estudio.
FIG. 3: EL LUGAR: como condiciones del lugar se tiene un río, un terreno inclinado, la calle y los árboles
FIG. 4: FACHADA CON MANIFESTACIÖN DEL BASAMENTO
FIG. 5: FACHADA SIN MANIFESTACIÖN DEL BASAMENTO
Bibliografía
FRAMPTON, Kenneth. "Historia Crítica de la Arquitectura". Barcelona, Ed. Gustavo Gil S. A. 1981.
Brownlee, David. "Louis I. Kahn". De Long, David. Barcelona, Ed. Rizzoli International Publications, New York, 1991.
Marchán, Simón. “La arquitectura del siglo XX -Textos- ”. J. Martínez de Velasco. Ed. Simón Marchán Fiz, Compilación El Orden Es. 1960.
Giurgola, Romaldo. “Louis I. Kahn”, Ed. Gustavo Gil. Barcelona. 1980.
Kahn, Louis. “Louis Isidore Kahn: escritos, conferencias y entrevistas”. Ed. Croquis. 2003.
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