Historia de la Arquitectura Moderna: Casa de Tristan Tzara.- Paris-Francia 1926-Adolf Loos

Iván Camilo López, Código: 25061461

Casa de Tristan Tzara.- Paris-Francia

1926-Adolf Loos

Lienzo en blanco

Para Adolf Loos superar el uso del ornamento es símbolo de evolución cultural, un cambio necesario para el siglo XX, donde a diferencia de las épocas pasadas en las que cada etapa se le atribuye un estilo estético definido, Loos pretende que el siglo XX sea reconocido por abandonar toda “cadena” que representa el ornamento, ya que su uso significa el estancamiento de una sociedad “¡Pero cuándo el ornamento es bonito...!” Para mí y para todos los hombres cultos el ornamento no nos aumenta la alegría de vivir. ⁽¹⁾. Este pensamiento convierte a Loos en un polemista de la época (finales del siglo XIX- inicios del siglo XX), Precursor del racionalismo arquitectónico y pionero de la des-ornamentación, estas características son las que para mí hacen tan particular e interesante el proyecto del que se hablara a continuación, lo menciono porque a Tristan Tzara se le atribuye una imagen muy similar, un personaje controversial y polémico para su época.

Esta edificación se contextualiza dentro de un marco vanguardista parisino, en donde el art déco se encuentra en su mejor momento, busca superar el Art Nouveau, que al igual los ideales Adolf Loos significa superar el exceso de la ornamentación y las líneas sunuosas, este estilo logra ser recordado por la la Exposición internacional de artes decorativas celebrada en Paris 1925, mismo año en el que Adolf Loos diseña la casa de Tristan Tzara.

Para Loos la arquitectura debe responder a las necesidades humanas y pensarse desde lo estrictamente funcional sin que intervengan de ningún modo las artes aplicadas en ella, debido a que para él nunca debe mezclarse la necesidad con el placer o la artesanía con el arte, por eso todo proyecto que nazca a partir de una función o de un uso en específico requiere que para su desarrollo se siga esa lógica de la necesidad sin la intervención de una intención artística que puede llegar a malograr el objetivo principal.

1. Adolf Loos,(1918) Paris, Ornamento y delito, P.3 Tomado desde: http://paperback.infolio.es/articulos/loos/ornato.pdf

Loos se interesó por los aportes de la materialidad en la arquitectura y propuso varias teorías para dar dotar a un proyecto de jerarquías orden e individualidad a los espacios interiores. Todos estos conceptos anteriormente mencionados se pueden ver representados en la casa de Tristan Tzara de manera muy explícita.

Esta casa se encuentra sobre la calle Junot, en un predio levemente inclinado, fue levantada con 10,6 metros de ancho, fachada que da a la calle y 17,6 metros de largo, situándose entre medianeras.

La primera percepción que encuentro en el trabajo de la fachada principal, es las sencillez con la que se expresa, una austeridad en sus elementos donde solo se muestra lo que es fundamental y básico para dar a entender el proyecto, no da ninguna imagen especial y pasa desapercibida en el entorno local. Entrando un poco más en lo especifico se encuentra lo que sin duda es una idea de división en dos sentidos , una bipartición muy fuerte, marcada por ejes centrales; en un sentido vertical se define una simetría total a partir del eje geométrico, lo que para esta época es una herramienta de diseño inusual, que pareciera tener la intención de evocar el pasado, donde la presencia de dos accesos de madera con pequeñas ventanas protegidos por un balcón puede llegar a tornarse confusa en lo que respecta a la aparente función dentro de la unidad ¿son para llegar a puntos diferentes de la casa?, ¿Se divide funcionalmente en dos viviendas independientes?.

La intención de bipartición también se encuentra en sentido horizontal, divide el conjunto a la mitad por medio de la materialidad, generando dos cuadrados casi perfectos, la parte inferior la deja expuesta con piedra, material que fue elegido en cierta medida por razones técnicas⁽¹⁾, además de lograr una continuidad con el muro del jardín que se encuentra aledaño a la casa, esto para mí es un reflejo que a pesar de que su arquitectura no se enfoque demasiado en la fachada sin embargo tiene en cuenta las condiciones de su entorno y su lenguaje; en la mitad superior se expresa con revoque blanco, dejando clara la intención de marcar una distinción entre estructura y recubrimiento. Esta bipartición marca la diferencia entre los primeros tres niveles que son de alquiler y lo que es la casa de Tristan Tzara en los últimos pisos, hecho que explica la razón por la que encontramos dos puertas de acceso una de las cuales no recibe con un espacio conformado si no directamente con una escalera para conectar con la vivienda del poeta.

1. “La avenue Junot que lleva a la colina de Montparnasse cruza terrenos muy abruptos. Se imponían pues, masivas obras de contención del terreno, resueltas en la trasera con anchos muros y sólidos cimientos. Al utilizar la piedra como material de fachada para los tres primeros niveles de la casa , la base del edificio se empareja con el adyacente muro de contención del jardín” Gravagnulo, Benedeto.(1988). Adolf Loos Teoria y obras. Editorial Nerea. P. 188

La vivienda empieza a partir de la segunda planta donde se encuentra un vestíbulo en el que nuevamente nace otra escalera que comunica con el resto de la vivienda y la otra entrada que sirve a una vivienda de alquiler en la primera planta. La tercera planta es donde se encuentra la mayor parte de la vivienda en el que se establece una sala comedor con una altura mayor al resto de la planta, un balcón frente a la calle Jonut, Chimenea, otros dos espacios con una altura inferior al resto que son salón para las señoras y una antecocina, en definitiva es la que en realidad corresponde el primer nivel de la vivienda, debido al cambio y contraste de los espacios interiores, la percepción del espacio resulta en una imagen tectónica reforzada por la presencia de pilares y pilastras. El cuarto piso se compone de habitaciones y una terraza, y la quinta no llego a terminarse.

Lo segundo que me llama la atención son las dos “perforaciones” curvas y rectas en las fachadas, de manera que parecen excavadas en el muro continuo, rompiendo el plano exterior, lo que da como resultado una sensación de estereotomía desde el exterior , estando en contraste con la descripción interior de la casa anteriormente mencionada, donde la percepción es netamente tectónica. En las perforaciones se disponen la mayoría de las aberturas que conectan al exterior manteniendo la simetría en su organización, lo que puedo entender de esto es una clara intención de aislar hasta cierto grado los espacios interiores del exterior, en el que los balcones y terrazas tienen el papel de intersticio. Es característico de Adolf Loos el manejo de fachadas sencillas, con geometrías simples y muy estáticas, esto muy ligado a su rechazo al uso de ornamentos, economía y ahorro de trabajo innecesario.

En cuanto al lenguaje de las fachadas laterales, se hace evidente que son resultado únicamente de los usos interiores, se compone de elementos aleatorios sin ningún patrón ni orden visible, esta condición se interpreta como la unidad de dos ideas opuestas, una que es la fachada contemplada a partir de un proceso racional (distribución interior) y la segunda que es la fachada que se percibe impredecible, aleatoria y sin ninguna estructura aparente, esta contradicción me evoca a los pensamientos de Tristan Tzara en un contexto Dadaísta, quien dice: “ Yo escribo este manifiesto para mostrar que pueden ejecutarse juntas las acciones opuestas, en una sola y fresca respiración; yo estoy en contra de la acción a favor de la continua contradicción, y también de la afirmación, no estoy ni en favor ni en favor ni en contra y no lo explico porque odio el sentido común”.⁽¹⁾ Además de lo contradictorio lo aleatorio también tiene importancia y validez para este artista..

1. Tristan Tzara, (1918). Manifiesto Dadá. P.192

El interior es donde se denota una mayor reflexión e interés, aspecto que se hace muy evidente en corte en el que se podría llegar a pensar que se encuentra su mayor interés, aunque tendría que considerar la siguiente cita: “No diseño planos de edificios, ni fachadas, ni secciones. Diseño espacios. Para mí, no hay ninguna planta baja, primera planta etc. Para mí, hay espacios solo contiguos, continuos, espacios, antesalas, terrazas etc.”⁽¹⁾

Una casa cuyo diseño respeta las particularidades del cliente para ambientar sus espacios, siguiendo una línea de pensamiento donde el arquitecto llega a un cierto límite de intervención en el diseño, a lo que le corresponde “el muro y el mueble”, esto se plantea de esta manera con el objetivo de que a la final, el proyecto debe poder adaptarse a los gustos que el usuario tenga, caso en el que para Adolf Loos es el “mal gusto” de Tristan Tzara.

La posición ante el arte del poeta revela que aunque en ideologías y maneras de proceder de ambos tienen ciertas afinidades, en el fondo también tienen pensamientos muy lejanos , aspecto que me interesa resaltar en este caso al tratarse de Tristan Tzara como usuario, el máximo representante del dadaísmo, cuyas preferencias en el arte traspasan lo convencional, quizá el poeta no aceptaría muchas propuestas arquitectónicas que incluyan conceptos que él no comparta, debido a su posición radical en cuanto a sus ideologías, tan controversiales puede llegar a ser el movimiento Dada, que para muchos es considerado “antiarte”, aunque hay que considerar que sirvió como punto de partida para muchos movimientos artísticos posteriores como el surrealismo⁽²⁾ que busca superar el dadaísmo, este no es el caso, ya que Adolf Loos deja un “lienzo” en blanco con solo algunas pautas e insinuaciones para que el cliente complete la pintura con toda libertad; que en este caso para Loos es el “Mal gusto” de Tristan Tzara.

Sin embargo a pesar del diseño minimalista que adopta Adolf Loos, fiel a su idea de la arquitectura sin adornos, aplica el Concepto “Raumplan” que es uno de sus aportes más significativos a la arquitectura del siglo XX, dando particularidades a los espacios interiores, jugando con sus dimensiones verticales, como ejemplo está el salón-comedor en el tercer piso que mantiene relación con un balcón sobre la avenida Junot y la intervención de una chimenea estos son aspectos que de por si me dicen que es un espacio de mucha importancia razón por la que Loos ubica este espacio en un nivel levemente superior al que se encuentra el resto de la planta, logra de esta manera autonomía y jerarquía en los espacios dependiendo del uso que se les dé. se podría decir que el espacio entre

1. Adolf Loos . tomado desde: http://historiaarqusps.files.wordpress.com/2012/02/adolf-loos-hist-iv.pdf

2. “Es un dictado de pensamiento, sin la intervención reguladora de la razón, ajena a toda preocupación estético o moral” – André Breton. (1924) Primer manifiesto surrealista.

más pequeño adquiere un Sentido más “secreto”, en definitiva Loos siempre está en la búsqueda de atmosferas adecuadas, Como él mismo afirma: “cada espacio interior posee unas dimensiones propias relacionadas con el carácter y uso que se le dará.”⁽¹⁾

Otro concepto del que se vale es la teoría del aterrazamiento, haciendo uso de el en la cuarta planta, ahí se encuentran los dormitorios y una terraza, dando la oportunidad al usuario de tener esta relación como símbolo de libertad personal, esta idea me transmite que a pesar del carácter íntimo que lleva consigo un dormitorio, además enfatizado con el Raumplan por su altura baja en relación a los otros espacios de la casa , se tiene la facilidad de relacionarse con un espacio abierto que hace de espacio intermediario entre lo íntimo y el mundo exterior.

Este concepto de espacio interior contrasta con el tratamiento que dispone en la fachada principal dotada de sencillez para servir al espacio público y también junto al lenguaje en la fachada posterior que aparenta componerse a partir de elementos sueltos e independientes, conforman 3 sintaxis que

Contrastan entre sí. Esta idea parece ser consecuente con el pensamiento de Tristan al afirmar que “el arte es una continua procesión de diferencias”⁽²⁾.

Como conclusión de todo lo expuesto anteriormente es preciso denotar las condiciones tan particulares en las que se construye esta casa, en un contexto de cambio al Art Déco donde Loos acierta en el diseño de la casa al dejar libre la posibilidad de adaptar los espacios como Tristan Tzara considere adecuado, aunque para Loos no sean de su gusto, pero sin abandonar en el diseño el carácter particular de cada espacio. Quizá la fachada principal no sea reflejo del pensamiento de Tristan Tzara porque se presentan como una imagen pública y simple, simétrica, ordenada y de proporciónes clásicas, pero por lo demás se adapta muy bien ofreciéndole a cada espacio una experiencia diferente.

1. Enrique Chao “Arquitecto sin adorno”. Paris P. 48

2. Gravagnuolo, B. “Adolf Loos: teorías y obras”. p.188