Residencia en Chestnut Hill (Casa Vanna), Philadelfia, Estados Unidos, 1962
ARQUITECTURA MODERNA Y EL APORTE DE VENTURI
Por: Cristhian Camilo Angel Machete
Basado en el libro del arquitecto Robert Venturi, Complejidad y Contradicción de la Arquitectura, se hará una breve descripción de como él veía la arquitectura y a los arquitectos de su época, y más aun a los del Renacimiento, guiándose por las monumentales obras de Miguel Angel entre otros. De aquí parte para describir como afecto su manera de crear espacios y de cómo se fue reemplazando por básicamente planos, algo que rechazó con el carácter determinante que lo caracteriza.
En su obra es bastante analítico en sus composiciones y las ajenas, menciona a Le Corbusier como un apasionado por el templo griego, y él como el arquetipo opuesto, refiriéndose a los requerimientos contradictorios de relación interior-exterior, no son esculturas en grandes paisajes, sino contenedores espaciales que definen calles y plazas, principio general urbano, conjunto de solidas imágenes tridimensionales. Venturi a contra corriente a la “generación de grandiosas pretensiones destructivas”.
La Casa Vanna fue diseñada específicamente para su mama, una señora de la tercera edad, algo que su hijo y arquitecto tuvo muy en cuenta a la hora de plantearla, en la primera planta los espacios básicos de habitabilidad y bienestar que deja muy marcada una profunda conciencia más allá de la creatividad, punto positivo que se le atribuye, dejando de lado el orgullo y la pretensión para dar lugar al construir para servir.
Con una fachada pequeña a nivel del piso y grande por su cubierta de dos aguas y la gran chimenea que rompe de manera asimétrica el edificio, “crea una imagen casi simbólica de una casa”, puerta, ventana con combinaciones convencionales de puerta, ventana, chimenea y remate angular del tejado, con distorsiones espaciales como son los dos espacios frontales (habitación, cocina) que se definen por la forma y cantidad de las ventanas, que fragmenta la edificación en partes similares, pero que no corresponden a una especularidad. Como en la Millowner´s Building de Ahmedabad de Le Corbusier con la rampa y escalera diagonal marcada por un vacio que delimita permanencias rectangulares, o en la Universidad de Virginia de Jefferson y la yuxtaposición que contrasta en tamaño, pero no en lenguaje compositivo, caracterizada por la monumentalidad de las columnas de variada proporción con retroceso en la parte inferior, destacando un frontón triangular elevado a modo de pronaos, generando dentro de el un espacio interfachadas, y más atrás otro espacio tipo aula (balcón) de doble altura.
Dos elementos verticales (chimenea y escalera) compiten por la posición central, uno sólido y otro hueco, marca la centralidad no geométrica que sobresale del resto de la casa , y llevados de la mano por el eje de la entrada de la que sobresale un parapeto, pero en el interior estos elementos son espacios residuales debido a los espacios que los rodean , es decir pierden su jerarquía dependiendo de dónde se les observe, esto acompañado del hecho que sus espacios son bastante generosos con respecto al área total de la planta que se consiguió con la reducción casi total de la circulación interna. Complejidad y contradicción en comparación a la tensión y equilibrio, dualidad entre híbridos y puros, distorsionados y rectos, ambiguos y articulados, aburridos e interesantes, convencionales y diseñados, integradores y excluyentes, redundantes y sencillos, la inclusión llevada en variaciones, en escala de grises, no movido del blanco al negro o viceversa, sino comprendiendo el patrón de medios, tuvo gran influencia por el Manierismo, el Barroco y el Rococó, llevando a cabo sus ideales “no modernistas” pero arraigado a la función.
Diciendo la forma evoca la función, la arquitectura moderna separa y articula los elementos, especializa las formas de acuerdo con los materiales y la estructura nunca implícita, haciendo alusión a sus elementos retóricos de doble función poco frecuente en la arquitectura actual, el orden sin propiedad causa el formalismo o la propiedad sin orden es sinónima de caos, “no hay ninguna obra de arte sin un sistema” Le Corbusier, las incertidumbres dan lugar y validez a la arquitectura. También hace un especial énfasis en el ejemplo de un puente que con su distorsión en los pilares se adapta de manera casi natural al terreno irregular del barranco para generar un orden directo y geométrico; y como lo menciono James Ackerman sobre Miguel Angel, conserva sin variar las características esenciales de los trazados antiguos para forzar al observador a recordar su origen mientras disfruta de la innovaciones, la contradicción adaptada crea un todo que quizás es impuro, la contradicción yuxtapuesta crea un todo que no está resuelto; mientras la primera modifica sus partes o su todo, cambia su configuración para articularse de manera casi arbitraria, la segunda genera formas nuevas con elementos originalmente diferentes pero conjugados sin modificarse en los que se podría seguir trabajando o simplemente definir un final parcial, “una obra de arte nunca se termina, solo se abandona” Leonardo da Vinci.
Su obra es bastante diversa en tipología de elementos, a primera vista la edificación es recesiva a la vista, crea la sensación de que es una casa y a la vez una clase de aparato que aterrizo en ese lugar y decidió instalarse de manera permanente, no conjuga ni con el tiempo ni el espacio que se le adjudico, que parece salido de una película de ciencia ficción o de un universo paralelo, y paralelamente define varias de sus teorías entre ellas el de la relación espacial, que maneja un lenguaje compositivo diferente pero que en conjunto se fusionan (interior-exterior), como las bases rectangulares donde descansan las pechinas que a su vez sostienen las cúpulas que se elevan hacia el cielo en las catedrales, o el cinturón verde de las ciudad jardín que bordea de manera circular un conjunto de triángulos (manzanas) junto con círculos menores concéntricos que crean otras figuras marcadas por calles que recorren como diámetros, radios o secantes que cruzan la ciudad –panorama que desde afuera no se muestra claramente- , o el juego del cubo de Peter Eisman con sus subdivisiones, rotación, alargamiento, etc., que involucra una abstracción del punto de partida y que forma espacios ortogonales con o sin diagonales tanto adentro como afuera en proporción pero con transversales que rompen la serenidad del alojamiento, involucrando la exclusión de puertas brindando cualquier posibilidad de actividad a los espacios. Aalto mencionado también marcaba fuertemente diagonales influenciado en la necesidad de del buscar la luz natural pero que individualmente cada espacio o unidad habitacional o de permanencia era rectangular, como lo muestra el exterior cóncavo del estudio de Munkkiniemi que forma un anfiteatro al aire libre que crea espacios residuales interiores o el MIT con el frente curvo a lo largo del rio contrastando con la rectangularidad de la parte posterior y también en los apartamentos de Breman mantiene el orden rectangular de la unidad básica de vivienda de Le Corbusier pero la disposición general en planta ha distorsionado en diagonales para orientar la vivienda al sur en busca de luz y vista e incluso en el Centro Cultural de Wolfsburg organiza necesariamente diagonales los auditorios, pero en los dos casos las escaleras y áreas de circulación permanente se mantienen rectangulares en planta ; también un ejemplo de las excepciones de Wright es el Morris Store que en planta es un perímetro rectangular que encierra de manera parcial un circulo marcado por una rampa pero eso si conservando sus parámetros de “entre lo particular y privado, las funciones públicas y las generales” ; y las vigas de longitud singular de Kahn sobre la gran luz del gimnasio en el proyecto para Trenton Community Center son recursos excepcionales para mantener la regularidad de las cúpulas del techo, o como las banderas superpuestas de Jasper Johns que generan una extraña tensión, iguales en proporción entrelazando las líneas y las estrellas de forma que los tamaños influyen de manera visual, pero en donde la bandera de en medio actúa como elemento de transición para crear una continuidad. Otros claros ejemplos son el Merchant´s National Bank en Grinnel, Iowa de Sullivan, combinación de horizontales, verticales, diagonales y curvas alrededor de la ventana en el ojo de Buey del edificio de forma cúbica, que marca la entrada en una doble fachada con frontón superpuesto que no guarda relación aparente con el resto del edificio que es austero y simple; y la Casa Güell de Gaudí que superpone una puerta grande para coches y una pequeña para peatones produciendo una viva tensión en un solo espacio, que genera dos funciones dependiendo del momento de las necesidades conjugando indirectamente la cuarta dimensión (tiempo) de la arquitectura. Y así Venturi lo hace saber a través de las diversas formas que yuxtapone –contradicción- con todas las formas geométricas que conoce en un solo núcleo compositivo.
Por otro lado la época moderna muestra diversidad de especies en un mismo mundo, Venturi y Geoffrey Scott – The Architecture of Humanism 1914- valoran las acciones de los hombres y el efecto de las formas físicas sobre su espíritu, como en el proyecto del ayuntamiento de North Canton, Ohio en donde hay una conexión con las últimas obras de Sullivan, mayor logro desde el punto de vista americano, en contraste por ejemplo con el Memorial de Roosevelt que muestra serenidad grandeza, talento escenográfico o Mies y Johnson con el Seagram de disposición rectangular, contrario a la agonía de función y estructura de Kahn.
Wright no permite la diagonal ni en escaleras o rampas, donde las oculta por medio de muros, o con colgantes verticales las mantiene, Le Corbusier las ostenta como por medio de las necesidades del coche que tanto aplica a sus proyectos, algo que Wright no permitía, viendo esto como irregularidades en sus plantas, se marca profundamente la perpendicularidad hasta el punto de perderse el trayecto natural del vehículo.
Aalto y Kahn adoptan el orden a la excepción circunstancial simbolizada por la diagonal, Le Corbusier la yuxtapone, Mies la excluye, Wright la esconde, o entrega todo su orden a ella, la excepción se hace la regla.
Obras como el proyecto Pearson House (1957), proyecto de una casa en la playa (1959), proyecto de la casa Meiss, en conjunto con Short (1962), guardan una estrecha relación con la casa Vanna, que por supuesto es moderna por lo novedoso a la época, pero antimodernista por lo lejana al movimiento moderno en auge de los máximos representantes.
Venturi involucra elementos que especifica claramente en su libro de manera individual con nombres propios, sus obras y la de los demás, tanto para validar sus teorías como para contradecir o refutar las ajenas, lo cierto es que este maestro marco un hito importante en los Estados Unidos y para bien o para mal represento un movimiento casi en solitario que solo su nombre describía por sí mismo, claro está saber que recibió el premio Pritzker en 1991 y con ello se galardono el conjunto de edificaciones que el defendió con hechos y con teorías, que le valió un “espacio” en la historia de la arquitectura y aporte fundamental a las generaciones siguientes, generó una serie de sensaciones sobre el orden del desorden y como con ello se puede jugar con variadas composiciones en formas, tamaños y escala, y como ver que sus fachadas aunque austeras –diferente al renacimiento- involucra retrocesos, adelantos a ciertos elementos que muestra alzados a diferentes distancias en diferentes planos en un desorden continuo o un orden amorfo.
BIBLIOGRAFIA
1. Venturi, Robert. Complejidad Y Contradicción en la Arquitectura. (Versión española), Antón Aguirregoitia Arechavaleta y Eduardo de Felipe Alonso, Arqs. Barcelona 1972
2. http://es.wikipedia.org/wiki/Casa_Vanna_Venturi
3. http://es.wikipedia.org/wiki/Premio_Pritzker
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