miércoles, 19 de noviembre de 2014

Casa Uriach - Jose A. Coderch 1961 - Le ametlla del vallés - España



Universidad nacional de Colombia - Facultad de artes
Escuela de arquitectura - Historia de la arquitectura moderna
Casa Uriach - Jose A. Coderch 1961 - Le ametlla del vallés - España
Miguel Alejandro Camacho Cárdenas

HABITAR COMUNIDAD
La manera en que se entiende lo que es vivienda y como se hace vivienda  varía según el tiempo y la sociedad, conforme las generaciones avanzan y cambian las maneras en que entienden la sociedad y el cómo se transforma, este es un tema presente en la arquitectura de Jose Antonio Coderch desde sus inicios ya que para él, la vivienda afecta no solo a sus habitantes, “la casa es propiedad de la gente que pasea, que la ve, de todos los ciudadanos y por eso digo que el arquitecto, por encima de todo, debe dar a las obras una cosa, serenidad y dentro de la serenidad, orden, porque las cosas que inquietan al final cansan”[1]; Cito esta frase ya que muestra uno de los principios en los que se basa la arquitectura de Jose Antonio Cordech, y este principio es que no es momento para que los arquitectos exploren su personalidad de manera libre en los pedidos que les hagan sus clientes, sino que por el contrario el cliente y sus deseos son y siempre serán lo que deba influenciar más en el diseño de la casa por lo menos en la organización funcional.
En el escrito que Coderch realizó titulado “ No son genios lo que necesitamos ahora”[2], expone la necesidad de que la comunidad de arquitectos alrededor del mundo se detengan a pensar por un momento y piensen menos en la arquitectura como elemento único y ajeno a su entorno, en el dinero y en las ciudades modernas y por el contrario empiecen a reflexionar sobre su oficio como arquitecto y en como esto implica que aunque si es posible tener libertad al momento de ejercer esta profesión se requiere también que haya un límite o un lineamiento que sea universal para que no se alejen tanto de la realidad y del contexto en el que estén viviendo.
El ejemplo era lo más importante ya que el trabajar de manera constante podía permitir estar vigilantes para no confundir situaciones que están ligadas al ser humano como la flaqueza y el derecho a equivocarse con la “voluntaria ligereza” o la inmoralidad, Coderch veía a la sociedad organizada en una pirámide en donde las masas estaban en la base y en la cúspide se encontraban los pocos privilegiados pero, para él la categoría más importante era la que se encontraba en el medio, esta categoría era la de la aristocracia, la cual podía llegar a inspirar a quienes estaban en la cúspide mediante las obras y las palabras y que a su vez podía inspirar a las masa que se encontraban en la base con el ejemplo.
Esto era posible ya que para el, un aristócrata es la persona que no hace ciertas cosas, aun cuando autoridades tales como la iglesia y la Ley las aprueben o las permitan, para Coderch debería tratarse de conservar la riqueza espiritual que los maestros han dejado por medio de sus obrasa lo largo de sus carreras y no solo analiza la forma de estas ya que de este modo no seria tan común ver en nuestra actualidad y en nuestro contexto a tantos arquitectos que buscan mas lo económico que lo intelectual, esto a mayor escala serían los urbanizadores que cada vez hacen proyecto mas antihumanos, también puede verse que lo que antes era el patrimonio de una ciudad y un elemento con el que la gente podía identificarse como individuos o como comunidad ahora son remplazados por proyectos, que en su mayoría no respetan su entorno en su intento de resaltar y puede generar una reacción negativa en la comunidad que va a habitar dichos proyectos.[3]
Estando presente en España durante todo el periodo de la postguerra, Coderch está en una posición privilegiada para ayudar a reconstruir la identidad de una sociedad y de reestablecer un sentimiento de pertenencia que se hacía cada vez más débil mientras las ciudades europeas eran golpeadas por la guerra y lo que antes habían sido sus monumentos y sus lugares con una gran carga de significado eran reducidos a un simple  recuerdo, esto generó que la población buscara una estabilidad, una identidad constante tal y como era antes de la guerra.
Ya en la década de 1950 en España se constituye el Grupo R cuya tarea principal era la realización de exposiciones para ayudar a la puesta en práctica de nuevas ideas a su vez que era un intento de buscar contactos en el mundo industrial; Uno de sus objetivos llegó a ser el luchar a favor de los nuevos movimientos en la arquitectura y cuestionar el conformismo de tantos constructores que se consideraban ajenos a los problemas artísticos, sociales y técnicos de la arquitectura que junto con los criterios del urbanismo de la época, amenazaban con romper la estructura de la ciudad de Barcelona en este caso y dar paso a peligros tales como la falsa monumentalidad.
Este grupo se mantuvo hasta 1958, aun cuando podía entreverse desde un comienzo que no contaban con la unidad suficiente para justificar la asociación de tan gran número de arquitectos ( en sus inicios eran parte de este grupo 8 arquitectos :Oriol Bohigas, Joaquin Gili, Antonio de Moragas, Jose sostres, Jose Antonio Coderch, Jose M Martorell, Jose Pratmarso y Manuel Valls, siendo Manuel Valls un colaborador de Jose Antonio Coderch desde sus inicios), todos estos arquitectos estuvieron influenciados al momento de crear esta agrupación por la llegada a España de los arquitectos italianos Gio Ponti, Alberto Sartoris y Bruno Zevi en el año 1949, invitados por el Colegio Oficial de Arquitectos de Cataluña y Baleares para dar un ciclo de conferencias sobre urbanismo y arquitectura contemporánea.[4]
"Coderch ya no se había mostrado partidario de celebrar la primera exposición. Alegaba su improcedencia, la falta de preparación, la diferencia de edades de los expositores, una especie de pudor de enfrentarse con la crítica y el público y un honesto temor a aparecer como dominados por un afán exhibicionista. Inútilmente se trató de convencer a Coderch. El que suscribe intentó hacerlo en una memorable visita: todo fue inútil. El Grupo R había de continuar navegando sin la valiosa colaboración de los arquitectos Coderch y Valls que se quedaron en el primer puesto. La ruptura fue, sin embargo, en el terreno ideológico; la amistad se salvó; hechos posteriores lo han demostrado cumplidamente"[5].
Con base en esto es entendible considerar que la arquitectura y el urbanismo no debería  proponer un nuevo modo de vida que cambie el actual, por el contrario debe perfeccionar los trazos que la sociedad genera por medio de la experiencia y en algunos casos de las modas; el genio según Coderch es esto mismo, una ocurrencia, no un fin y por lo tanto no puede usarse para definir una sociedad o una cultura, por el contrario solo sería útil para expresar los deseos de muy pocos y es por esto que cuando se trata de la vivienda, se debe mantener un lenguaje sereno en el que la identidad de quienes la habitan sea lo que predomine.
Aun así también debe ser una arquitectura muda cuando se mira desde la distancia, debe poder dominar el paisaje sin necesidad de sobreponerse a él, en el caso de sus obras, se puede ver planimétricamente, cuando se trata de casas para clientes específicos y no edificios complejos, que hay una secuencia de volúmenes sobre el terreno, que no solo tienen una base geométrica para su ordenamiento, su razón de ser es mucho más profunda y esta es la articulación de funciones específicas las cuales a su vez también determinan las dimensiones de los volúmenes individuales.
Ya en lo que atañe al elemento de estudio, la Casa Uriach de 1961, los deseos del cliente son expresados de manera concisa por medio de una carta, de la cual citaré un fragmento “Desearía que la casa fuese lo más parecida a nosotros mismos, o mejor a lo que nosotros tratamos de ser, sobria, austera, práctica, desearía que la casa fuera también como íntima, es decir que la vida en ella no fuese una exposición exterior, le ruego se acuerde que no deseamos decoración, así los dormitorios pueden parecer celdas, solo ha de haber lo mínimo indispensable .(...). Blanca, me horrorizan los colores bonitos, blanca toda la casa. Ningún color, blancas también las paredes”[6].
La manera como Coderch logra materializar los deseos de Uriach deja entrever una constante reflexión personal la cual le permitió a lo largo de su carrera la creación lenta pero continua de un lenguaje personal, de un lenguaje propio pero que a diferencia de muchos, este lenguaje y este estilo está formado para satisfacer al cliente antes que a los caprichos y al deseo personal de experimentar en cada ocasión posible.
Cuando vemos la planta de este proyecto es posible suponer que Coderch quiso generar dos lenguajes distintos, siendo el primero un lenguaje mudo hacia el exterior, que aunque a pesar de ser cerrado tiene un gesto de continuidad pero a la ves de variación leve al irse moviendo progresivamente el eje del muro exterior; a su vez se encuentra un segundo lenguaje ya en la zona social de la casa en donde antes de ser más cerrada como podría suponerse, es mucho más permeable al tener como cerramientos una serie de muros libres en el espacio los cuales soportan una cubierta plana continua que se yuxtapone al espacio en el exterior, creando en el punto intermedio de esta manera una apropiación del entorno cercano pero a su vez respetando su continuidad.
Es posible encontrar similitudes entre diversas de sus obras dado a que podía percibirse cierto naturalismo al tener influencias de otras artes tales como las obras de Kandinsky y otros cuyo objetivo era “hacer hablar al mundo mismo, en lugar de al alma conmovida por la imagen del mundo”[7], teniendo más facilidad en esto ya que la mayoría de sus obras le habían permitido una gran libertad para diseñar y llegar a formar un proyecto tan propio de su implantación que sería difícil concebir a uno sin el otro al estar puesto de manera que no pasa desapercibido pero tampoco llega a ser impuesto.
Los proyectos de Cordech, de especial valor esta casa muestran sus principios y el gran interés por darle un carácter austero pero no por eso sencillo a sus composiciones para que lo que prime sea el cliente y no los deseos del arquitecto, aunque por más que la arquitectura de Coderch sea considerada como fácil por algunos, es en realidad una arquitectura construida ya que se basan en una idea elemental a la que se subordinan los detalles, pero estos son más que una especificación de la imagen, son algo que determina el carácter del edificio.
La obra de Coderch está basada en un aprendizaje empírico que nunca se detuvo ya que desde muy temprano en su carrera considero prudente el identificar a donde quería que se dirigieran sus obras, como serían conocidas y cuáles serían sus fundamentos al momento de defender sus teorías, puede verse que en sus primeros años de profesión los escritos de Le Corbusier y de Mies van der Rohe eran de gran importancia para él, por ello es de esperarse que la teoría que el luego desarrollaría fuera un intento por conjugar dichas teorías con sus propios principios.
Durante la década de 1940 y 1950 las sucesivas discusiones que tenían lugar en los CIAM dejaban entrever una preocupación por el hecho de que durante los principios de este modernismo no existía un elemento humano latente en los estudios y publicaciones hechas por ellos mismos, esta percepción de la falta del elemento humano en la arquitectura estaba siendo percibida en muchos de los países occidentales si no es que en su totalidad.
Cometer el error de deshumanizar la arquitectura y el urbanismo era muy común en la época de la postguerra ya que al haber tantas posibilidades para innovar en una sociedad que se reconstruía lentamente, era entendible que muchos sintieran que su obligación era la de darle al mundo pequeñas muestras de genialidad y progreso ajenas al entorno en el cual realmente deberían haberse mimetizado.
 Esto puede encontrarse en todas las ciudades europeas en donde después de la segunda guerra mundial se busco volver a generar un sentido de pertenencia de los habitantes hacia su ciudad y su comunidad, pero al querer los dirigentes obras de renovación de escala internacional lo que hicieron fue abandonar la escala humana dentro del desarrollo de la ciudad  y dar paso a construcciones con unos costes extravagantes en lugar de usar dichos recursos para reconstruir los pequeños barrios y ayudar a recuperar elementos del pasado y no generar una idea nueva de comunidad ya que esta solo puede formarse a través de las diferentes generaciones que van retroalimentándose entre si a lo largo de décadas y siglos.
Lo único que generaría en este caso una renovación que no respete su entorno y su contexto es un desarraigo aun mayor por parte de sus habitantes.
La manera en que influye en este mundo cambiante es en que Jose Antonio Coderch se permite el ver las cosas de una manera más fría y de entender las necesidades de una sociedad que más que buscar la singularidad, deseaban formar nuevamente un entorno sereno donde primara la homogeneidad, la austeridad y donde aun asi, todos pudieran poseer un lugar que fuera más de lo que ellos mismos son, un lugar donde fuera posible vislumbrar lo que uno busca ser y que de una forma u otra pudiera encaminar al individuo hacia esto.
Esta homogeneidad y este sentido de pertenencia que se buscaba en estos momentos era una manera mas clara de mostrar que el hombre y la comunidad podían tener control sobre la forma de la arquitectura y que no debían volverse algo ajeno.
El control del entorno siempre será necesario en la sociedad y por eso, su desarrollo urbano y social deberían siempre trabajar para mantener dicho control pero no desde el punto de vista de que el hombre controla al entorno, sino que empieza a verse en estos momentos la idea de que el hombre logra controlar su desarrollo en el entorno y asi llegar a respetarlo y verlo como parte de su identidad.
“La arquitectura es la relación espacial del hombre con su entorno y la expresión de como se afirma en él y como sabe dominarlo. Por eso, la arquitectura no es solo un problema técnico, ni un problema exclusivamente organizativo y económico. En realidad, la arquitectura siempre es la consumación espacial de una decisión intelectual”[8].


[1] Conferencia: Centenarios 2013. Jose Antonio Coderch ( http://www.youtube.com/watch?v=Y1MpK7IktRY ) consultado el 23/03/2014
[2] Escrito realizado por Jose Antonio Coderch en 1960 a propósito del desconcierto arquitectónico del momento.
[3] Idea sacada de “No son genios lo que necesitamos ahora” de Jose Antonio Coderch, 1960 España
[4] BENÉVOLO, L.- Historia de la arquitectura moderna. Editorial Gustavo Gili, Barcelona, 1994.

[5] Antonio de Moragas, Los 10 años del Grupo R, revista Hogar y Arquitectura, marzo-abril, 1967, pág. 66-79)
[6] Carta de la señora “Uriach a Jose Antonio Coderch”, citado en Conferencia: Centenarios 2013. Jose Antonio Coderch ( http://www.youtube.com/watch?v=Y1MpK7IktRY ) consultado el 23/03/2014
[7] Antonio Armesto, Edificio de viviendas en la Barceloneta Jose Antonio Coderch y Manuel Valls, Editorial Medusa, 1996, pagina 77
[8] Cristina Gaston Guriao / Mies: El proyecto como revelación del lugar / Editorial Arquithesis N19 / 2005


Anexo


VISTA HACIA EL NUCLEO DEL PROYECTO
http://lacomunidad.elpais.com/aa-albors-arquitecto/2008/9/15/un-lujo-programa-dedicado-rosa-

    
PLANTA UNICA CASA URIACH
http://www-etsav.upc.edu/arxcoderch/en-f08.htm


Foto teatrino:

La idea es mostrar como aun en un contexto urbano como lo es Barcelona Jose Antonio Coderch cierra su arquitectura para que sea austera frente a las ciudades y frente a la sociedad, pero aun asi va utilizando elementos mas “ligeros” para permitir que la naturaleza del entorno juegue un papel importante en la vida de las personas que habiten su obra.


Bibliografía:
·         Cristina Gaston Guirao / Mies: el proyecto como revelación del lugar / Editorial  Arquithesis N 19 / 2005
·         Antonio Armesto / Edificio de viviendas en la Barceloneta, 1951-1955 / Editorial Medusa / 1996
·         BENÉVOLO, L.- Historia de la arquitectura moderna. Editorial Gustavo Gili, Barcelona, 1994.
·          http://www.youtube.com/watch?v=Y1MpK7IktRY (Centenarios 2013. Jose Antonio coderch. J12H) consultado el 23/03/2014
·         http://www-etsav.upc.es/arxcoderch/ consultado el 18/03/2014
consultado el 18/03/2014
 

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